Tuve que esperar dos días para mi respuesta, y pensé tal vez, que Justin quería evitar responder a mi sin fin de preguntas... papá estaba curioso por mi repentina ansiedad en la vida por algo, y me preguntó que era lo que estaba sucediendo. Le dije a papá que nada, no podía contarle que estaba conociendo a un chico por cartas y que apenas sabía su nombre, de modo que le mentí diciendo que me había inscrito a un club de teatro, luego odié mis palabras porque papá dijo que desearía verme actuando.
Ahora debía realmente inscribirme a uno. Pero yendo al punto, al fin recibí una carta al tercer día. Esta vez, junto a ella venía una cajita de color azul, y otra carta, solo que el nombre no era mío, sino de Max.
"Elizabeth.
Debo decirte que si bien tu nombre es hermoso, siento una larga distancia y no una cercanía al escribir tu nombre de pila... Pero no sé como puedo llamarte.. ¿Cómo suelen llamarte tus amigos y familiares? Mi nombre es un tanto corto, de modo que todos me llaman "Justin", no hay ninguna diferencia.
No, no soy un psicópata... ¿de dónde sacas esas cosas?, pero si de verdad quiero que esto funcione, no debes saber quien soy, todo es un misterio, de eso se trata la vida... Además, hace que todo esto sea más interesante, créeme, yo también escribo mis cartas apenas las recibo. Pero aunque no me creas, no te conozco, solo me he atrevido a ir dos veces a tu casa, y no tuve la posibilidad de conocerte. Y me aguantaré las ganas de conocerte.
Cosas como las que me contaste en tu ultima carta son las que necesito para saber que eres la persona correcta para depositar mi confianza, por eso quiero pedirte un favor... Conozco perfectamente la posición en la que está Max, y por eso le escribí una pequeña carta, que si bien es de alguien desconocido para él, es bastante sencilla y fácil de comprender para un niño de seis años, quiero que se la envíes diciendo que es de alguien muy parecido a él.
En cuanto a tu pregunta... Mamá trabaja con famosos, es algo complicado, eso fue lo que me hizo convertirme en un completo tonto, involucrarme con chicas que no me convenían...
Te envié chocolates... Dijiste que los amabas... pero quiero que disfrutes este chocolate en especial, tiene su historia, al menos en mi vida.
Con cariño. Justin."
Finalmente escrito con otro bolígrafo se encontraban estas palabras:
PD: Odio al cartero, "debo de estar a las 6 en punto esperándolo con carta en mano" demore estos dos días apenas tres minutos y ya no estaba... supongo te tienes el mismo problema que yo... pero no tenemos opción.
Sonreí al leer esas palabras mucho mas que durante toda la carta, tenía la completa razón.
Abrí lentamente la cajita, para encontrarme con otra carta, y unos pequeños pero muchos chocolates de diversos colores... Fue bastante entretenido.
"Elizabeth...
Recuerdo perfectamente que tenía 6 años... los mismos de Max, cuando le llegó a mamá una pequeña cajita azul con chocolates de un hombre misterioso... y ella decidió botarlos a la basura porque no sabía si sería bueno comerlos, Los comí a escondidas y me enamore de su sabor... desde ahí que siempre los como... sobre todo cuando estoy algo nervioso... me hace recordar mi niñez y mis problemas se esfuman... Es la misma cajita en donde venían por primera vez estos chocolates, creo que eres especial, mereces tenerla. Justin"
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