Levanta la mirada

3

09:42 de la mañana, leí en mi reloj, que estaba en la mesa de la cómoda. Mire mi pieza estaba tal cual como yo había llegado, me había quedado dormida, dormí más de 12 horas ya que había llegado a las 20 hrs en punto a mi casa.

Restregué mi cara y luego até mi cabello en un "tomate" desordenado. Estaba s los pies de la cama sentada. Me quite la ropa sucia y me cambie por una camisa larga de mangas que también me quedaba hasta los muslos.

Baje la escala y cepille mis dientes. Estaba como una chica nueva. Moje mi rostro y ya estaba lista para un nuevo día. Baje las escaleras y no había nadie, ni mi tía, ni mi madre y tampoco la cachorra.

Había un mensaje sobre la mesa de centro en la sala de estar.

Fuimos a la playa con tu tía y Deysi.
Pd: llámame cuando despiertes.

Tome mi móvil y esperé dos timbres hasta que me madre me contestara. Una conversación trivial, mantuvimos no más de 1 o 2 minutos hablando.

Entre a la cocina y busque en el refrigerador un huevo, leche, jamón y queso, planeo prepararme un omelete.

*

14:00 horas y ya me encontraba comiendo otra vez, mi madre había llegado y de paso había comprado comida China para que almorzáramos. Lo disfruté mucho, esta comida es mi favorita.

—Hey— dije contestando mi móvil, alguien me estaba llamando. —permiso.

Me le levante de mi puesto y salí al patio a hablar con más tranquilidad.

—Ágata hola, soy Stephan , el chico del parque— me dijo a penas le volví a contestar.

—Claro, cómo estás?

—Bien gracias, oye. Me preguntaba si es que te gustaría salir hoy.

—Depende, a qué hora— le pregunte.

—¿Qué tal a las 21:00?— me sugirió.

—Okay, nos vemos en el paradero— esta vez sugerí yo.

—Genial, ire con unos amigos si es que no te molesta— me aviso.

—En absoluto— le dije— nos vemos.

—Si, cuídate— finalizó la llamada y me quede un momento pensando.

¿Iré a una fiesta? Dios, hace mucho tiempo que no iba a una. No soy ese tipo de chicas, pero vamos, es verano, no tengo que hacer y menos amigos con quien pasar el tiempo, digamos que no terminamos muy bien el año. A excepción de mi mejor amiga, con ella siempre estoy bien.

—Ágata— grito mi madre.

—Voy— respondí.

Volvi a la mesa a terminar mi almuerzo. Comí lo más rápido posible y subí a mi habitación. Diablos, que debía usar. Hace más de un año que no voy a una fiesta. Mi primera opción fue llamar a mi mejor amiga, Gabriela. Le expliqué toda la situación y ella con agrado aceptó. A los 10 minutos ya se encontraba prácticamente internada en mi ropero. Le sugerí que me acompañara a la fiesta, seria incomodo ir sola. Ella accedió, le encanta este tipo de cosas.

Finalmente consiguió un conjunto apropiado para que yo lo usara. Traía un pantalón negro rasgado en las rodillas con un coptop del mismo color y transparente en la parte del cuello, ademas de una franela atada en mi cintura (esas camisas que son cuadrilla estilo campesino pero sin duda están de moda) . Deje mi cabello liso y guarde una coleta por si es que el calor era mucho y claro que si. Así que de todas formas ate mi cabello en un moño alto, al estilo de Ariana Grande, para que se hagan una idea. Mi mejor amiga usaba un vestido de corte normal de color burdeo y la tela está más o menos aterciopelada. Dejó su cabello con ondas.

—¿Dónde estás?— me pregunto Stephan a penas conteste la llamada.

—Saliendo de mi casa, llegó en 5 minutos— le dije finalizando la llamada. —Vamos al paradero, nos están esperando.

—Un segundo— grito desde el baño.

Saludamos a nuestros acompañantes de la noche y esperamos a que pasara algo de locomoción. 21:23 y recién pudimos agarrar algo para ir a la gran fiesta.

Me puse mis audífonos ya que iba sentada al lado de la ventana. Observaba el paisaje y los distintos lugares que recorríamos, pequeñas plazas, grandes centro comerciales, además de los departamentos que son gigantescos.

"Solo escribir para ti, ahora le escribo a los recuerdos que se fueron contigo"

Mire detenidamente a la frase que se presentaba frente a mis ojos, era un arte urbano, escrito en una de las murallas. Sonreí de lado. Mi ex novio solía escribir en las murallas. Tiré una fotografía y luego la edite un poco para publicarla en Tumblr.  Recibí algunas cuantas notas y luego volví a bloquear mi móvil. Habíamos llegado al destino, el lote de 7 personas con las que voy comenzaron a bajar del vehículo así que lo hice. Ni puta idea en donde estoy.

—¿Dónde estamos?— le pregunté a Stephan.

—Eso da igual, será una noche inolvidable— me miró con una sonrisa de oreja a oreja y tomó mi brazo adentrándome a la fiesta. Esta noche sería muy larga.