Narrador Omnisciente
Leyla estaba en su casa, decidiendo qué ponerse. Miraba y descartaba todo su vestuario hasta que se conformó por un vestido azul claro no muy formal. Estaba muerta de nervios y ansiosa por llegar al parque y conocer al chico de los collares.
No paraba de pensar quién podría ser. No sospechaba de nadie en su clase. Podría ser Jason, Scott, Adam, Thomas o cualquier otro chico. O quizás no. No podía ser Thomas ya que él era gay así que él estaba descartado. Pensaba que fuera Scott, el nerd del salón pero descartaba la idea tan pronto pensaba en lo tímido que era. Podría ser Adam pero le era imposible imaginarse al payaso de la clase enamorado de ella. Y ellos no eran las únicas opciones.
Leyla suspiró y negó con la cabeza. No debía pensar en quién podría ser. Le tomaría horas descartar a los chicos de su clase hasta encontrar al chico de los collares. Lo mejor que podía hacer era esperar. Lo descubriría en unos minutos. Se miró una última vez en el espejo y salió de su casa en dirección del parque.
Al llegar, se sentó en un banco cerca de una fuente y dedicó su tiempo a mirar como los niños jugaban mientras esperaba al chico de los collares.
El chico de los collares había llegado al parque unos minutos antes que Leyla. Había visto a Leyla cuando llegó y la vio sentarse en uno de los muchos bancos del parque. No fue hacia ella tan pronto la vio. Estaba demasiado nervioso para eso. No podía recordar la última vez que él haya estado nervioso. Sin embargo, Leyla tenía el don de causarle nervios y ansias.
El chico la contempló mientras ella estaba distraída. La encontraba hermosa con su vestido azul y cabello castaño. No sabía por qué ella se fijaría en él. Ella era demasiado bonita para él. Pero, él no estaba dispuesto a perderla.
Él tenía todo planeado perfectamente. Antes de que su mente le diera otra razón para retractarse, caminó hacia atrás de Leyla quien le daba la espalda ahora.
Leyla seguía tan sumida en sus pensamientos que se sobresaltó un poco cuando sintió los dos brazos de un chico a sus dos costados aguantando un collar pero se relajó cuando se dio cuenta de que era él. Al fin, iba a conocer al chico de los collares.
—¿Puedo? —preguntó el chico y Leyla rápido reconoció esa voz. Ella asintió con una sonrisa y él bajó el collar lentamente hacia su cuello para colocárselo a Leyla. Ella levantó su melena para facilitarle el trabajo y contempló el hermoso collar mientras el chico caminaba al frente de ella. Era lo más lindo que pudo haber visto en su vida. Y no solo el collar, sino el tierno gesto del chico. Ella elevó la mirada y miró al chico sin poder esconder su asombro.
—¿Siempre fuiste tú? —le preguntó Leyla al chico que ahora se había sentado al frente de ella. Estaba más guapo que nunca con su pelo rubio y ojos claros que derretían a cualquiera que los mirara.
—Siempre fui yo —confirmó el chico con una sonrisa—. ¿No te lo esperabas?
—No —dijo Leyla. El chico se sintió inseguro por un momento y no pudo evitar preguntar lo que quería saber desde que llegó.
—¿Te decepcioné? —preguntó temiendo la respuesta. Leyla suavizó ante los ojos temerosos del chico y le acarició la mejilla al chico.
—No me decepcionas, Adam —dijo y todas los miedos de Adam desaparecieron. El chico sonrió más amplio y Leyla le devolvió la sonrisa cuando vio un brillo divertido y malicioso en los ojos del chico.
—¿Ahora te gustan los collares? —dijo burlón pensando que Leyla se molestaría por regalarle todos esos collares.
—Me gustas tú, chico de los collares —dijo Leyla directa. Adam se sorprendió por un momento pero rápidamente sonrió.
—También me gustas, amante de los collares —dijo y Leyla rodó los ojos divertida.
Ambos rieron y ambos sabían que ese era el comienzo de una linda historia.
Adam en multimedia. <3
Publicaré el epílogo y los agradecimientos en un rato.
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Collares (Pulseras #2)
Short Story"Ella siempre estaba de mal humor y odiaba los collares. Él adoraba verla enojar y ¿qué mejor forma de hacer eso que regalándole lo que más odia?" ------------------------------------ Secuela de: "Pulseras". Nota: si no has leído "Pulseras" entonce...