Él la amaba,
Ella anhelaba tenerlo a su lado,
pero el destino no los dejaba tenerse.Ella fingía no quererlo,
Él hacia lo mismo,
pero sabían que era imposible seguir mintiéndose.Jamás lograrían ocultar el sentimiento
que se hacia presente al cruzar sus miradas,
un nirvana infinito, lleno de tentación
los invitaba a su perdición
y a la perversión.