Todo tranquilo, nadie cerca y tampoco hay mucho ruido; solamente el murmullo lejano de otros alumnos de la escuela. Decido sentarme en el suelo y recargar la espalda en la pared.
Saqué el iPad de mi mochila y me dispuse a leer el cómic que tenia pendiente.
Disfrutó mucho estos momentos de soledad. Sin nadie que me este molestando, gritando o regañando, sin escuchar las tonteras de mis otros amigos (a pesar de que me gusta pasar tiempo con ellos) o estar discutiendo con una de mis amigas, siempre habrá un rato en donde prefiera estar solo.
El cómic se pone cada vez mejor y ya casi llego al final cuando...
Cuando ella aparece y me arrebata el iPad de las manos, se sienta entre mis piernas y busca el juego de Mario Kart. Se ve tan tranquila y concentrada en la carrera virtual hasta que su cara hace un gesto adorable que indica que se va a molestar porque esta perdiendo. Se nota desesperada; hace todo lo posible para no perder pero es imposible ya acabó.
—¡Tonto juego! —grita molesta. Yo solo comienzo a reír por lo bajo debido a su tierna rabieta. Infla sus cachetes de manera irresistible para mi y...
Y me doy cuenta que tiene claras intenciones de tirar el iPad algún lado. Es aquí donde mis sentidos están alerta y le quito el aparato de las manos.
—¿A dónde con eso niña? —ella no parece contenta con lo que hice y hace un puchero que tendría comparación con el de un cachorrito enojado. —No puedes tirar las cosas de los demás solo porque te molesta haber perdido.
-—Pero... Pero el juego... Es... Es... Arg! –Aguanto las inmensas ganas de reír y decirle que se ve tierna haciendo rabietas pero eso sólo la haría enojarse más y se iría. Así que opto por algo más sencillo.
La tomo del mentón, hago que me mire y le doy un tierno beso en los labios.
Se queda quieta por un momento y cuando me aparto veo que esta hecha tomate, ya no es por el enojo si no por la pena. ¡Dios mio! De verdad que amo a esta chica. Nunca me aburriría de ver esas lindas mejillas teñidas de color carmín, de verla enojada cada que pierde en algún juego, o hacerle bromas a los demás, es mas, no me canso de ella.
—Eres un tonto –esa es su forma de decir "te amo". Sonrió y la miro directamente, aparta la mirada al frente y flexiona las rodillas a la altura de su mentón, por ultimo esconde su cara allí.
Es tan tierna y adorable, aunque a ella le cueste admitirlo. Me gusta saber que aunque todo el tiempo se hace la fuerte también tiene sus lados de fragilidad.
Tomo el iPad y abro la cámara, pongo cámara frontal y cuando digo "¡Mira!" alza la cara y lo tomo una foto cuando aún esta rojita de la cara.
—¡Oye! Eso no se hace… –Se que cuando la vea querrá borrarla pero mientras la disfrutare un rato. —Borra eso antes de que en verdad rompa ese aparato –Plan fallido se que lo hará si no pienso en algo rápido.
Escuchó que suena el timbre que avisa la siguiente clase y se me ocurre una idea.
—¡Una carrera! –exclamo yo. Se que ella no corre mucho y no le gusta, así que tengo las de ganar hoy —El primero que llegue al salón hace lo que guste con la foto...
—¡Eso no se vale! –grita.
—En sus marcas. Listos...
—¡Nooo! –ni siquiera dije fuera y empecé a correr hacia el aula —¡No es justo! –parece que lo grita molesta pero se que esta riendo.
Y es así como pasamos uno de los mejores momentos juntos. Y como dije al principio, puede que me guste la soledad pero pasar ratos con ella es de lo mejor.
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Momentos
Random¿Te acuerdas de aquella vez que estabas tan feliz y saltaste por todo el lugar? ¿O de la vez que lloraste en tu habitación por haber pasado un mal rato? ¿También recuerdas el día que te enojaste por algo y te la pasaste rompiendo cosas? Esos son mom...