HERE FOR YOU

Tienes un pedacito de mi alma...

POV'S HERMIONE

¿Cómo debo pregúntaselo? Debería empezar con un: Has comido algo que te ha sentado mal... o... ¿estas de este humor de perros porque sí? o puede que con un: Tranquilo, ese es gay. Pero lo único que se resbala de mis labios es un...

- ¿Estas bien?-

- Claro, ¿Por qué no debería estarlo?- dice aún con las manos en forma de puño y con el ceño fruncido. En estos momentos me recuerda un poco a Jace, tienen una forma parecida de enfadarse. Bueno "parecida". A Jace siempre se la acaban poniendo los nudillos blancos y no se contiene para nada. En cambio, mi hermano es capaz de contenerse y no paga su frustración con otros ni dando golpes a cualquier cosa.

Jace enfadado. Mi cuerpo se estremece. Siento como el miedo me invade y con ello las ganas de llorar, pero no aquí, no delante de mi hermano. Me centro en él y en Lara para dejar de pensar en mis miedos.

- ¿Qué te parece Lara? ¿Es guapa verdad?

-¡¿Qué?!- dice alarmado. Le veo sonrojarse levemente y se muerde el labio inferior, al igual que hago yo cuando estoy nerviosa.- ¿Por.. Por qué dices eso?- pregunta desviando la mirada.

-Bueno... pareces un poco tenso... y... ¡Oye! ¡Mírame cuando te hablo!

- ¡No! -parece frustrado.- Siempre que te miro adivinas lo que pienso, es como si me leyeses como un libro abierto.- No puedo evitar soltar una pequeña risa victoriosa, me encanta hacer este tipo de cosas, adivinar lo que la gente piensa, resolver rompecabezas. Sí, puede llegar a frustrarme mucho, pero cuando consigo resolverlo, me invade algo... una satisfacción que no soy capaz de describir.

- Pues mira a otro lado como si no existiera, pero voy a seguir interrogándote.

- Hermione, es una amiga- dice suavizando el tono, pero no le creo.

-Claro... una amiga que conoces desde hace dos días... - me mira y le muestro una sonrisa burlona- Por eso has estado toda la noche a su lado en el hospital, ¿no?- comento con sarcasmo.

- Hago lo mismo con mamá.- Nada mas oírlo mi sonrisa desaparece. Él lo ve y su gesto se vuelve dulce.- Lo siento... quiero decir... no es la primera vez que me he quedado en un hospital... bueno tú tampoco- empieza a ponerse nervioso.

- Lo sé, tranquilo. ¿Sabes? la echo de menos- informo intentado disimular mi tristeza.

- Yo también, pero veo su viva imagen en ti cada día.- Una sonrisa nace y no puedo ocultarla. Siempre sabe que decirme para animarme.

- Eso lo dices porque es igual de friki que yo- comento para sacarle a el también una sonrisa- anda, que llamarme Hermione... ¿Enserio es tan fan de Harry Potter?- suelta una pequeña carcajada- ¡No te rías! No te haría tanta gracia si te llamases Darth Vader o Voldemort- no puedo evitar reírme al imaginármelo.

- ¿Te imaginas?

- Créeme, lo hago.

Después de charlar sobre más nombres horribles y decidir que el que más le pegaba a Edgar era Steve Rogers (Capitan America) porque según él eran igual de atractivos. Lo siento hermanito pero, no. Llegamos a mi cuarto y nos fijamos en que me había llegado una carta donde me pedía que fuese a administración para recibir un paquete. El nuevo Steve Rogers se despidió de mí con un beso en la frente después de ver un mensaje. Parecía ser importante pero ya le había interrogado una vez, dos veces sería demasiado.

De este modo voy sola a administración, con los ojos puestos en todas partes, como siempre, por si Jace aparece con su mirada de diablo.

Ahora mismo estoy en el edificio central, el más grande, donde se reparten las clases. Aunque también se encuentra la administración y las salas privadas de algunos profesores o jefes de estudio. Ah y no nos olvidemos de la biblioteca, que aunque sea poco frecuentada, está bastante bien.