HERE FOR YOU

Todo va mal.

POV'S LARA

Me despierto recordando la pésima cena de anoche. A veces pienso en ir a clases de teatro, porque ayer Daniel ni se percató de mi estado, aunque pensándolo mejor, es normal que no se percatase, soy una persona que guarda muy bien sus sentimientos cada momento.

A ver, entiendo que mi mejor amiga quedase con Edgar simplemente para cenar, porque él no entra en el prototipo de chico que le gusta a ella, pero tampoco entiendo porque quería cenar con él, necesito respuestas.

Me levanto de la cama y me dirigo al cuarto de baño para lavarme la cara despues haber dormido toda la noche. Cuando vuelvo sobre mis pasos, me doy cuenta de que Kate no ha dormido en la habitación esta noche, ya que no esta en su cama. Estoy preocupada. ¿Deberia estarlo? Igual ha pasado la noche con Edgar... -suspiro- no quiero ni pensarlo, mejor le mando un mensaje.

KATE

Kate, no sé donde te has metido, pero por favor, dime donde estás y sobretodo si estás bien...

Quieras o no, al fin y al cabo es mi mejor amiga.

Después de estar revisando las redes sociales como hago cada mañana, veo que ha pasado un buen rato desde que le he enviado el mensaje a Kate. Ninguna respuesta. Le vuelvo a enviar otro mensaje, pero esta vez más cabreada.

KATE

¡Maldita sea Kate! Como no me respondas a los mensajes voy yo misma a por ti y te traigo de los pelos.

Creo que he enviado el mensaje sin haberlo pensado dos veces...

KATE

Lo siento, no tendría que escribirte de esas maneras, pero es que no se donde estás y estoy preocupada. Por favor, cuando veas esto, llámame.

Menos mal que hoy es domingo y me puedo tomar el día tranquila, sin clases, preocupándome de mi misma... Suena mi politóno móvil y pienso que es Kate, así que cojo rapidamente y contesto.

-¡Por dios, al fin me respondes! ya era hora.

-¿Cariño?

Mierda. Quería el domingo tranquila.

-Hola Dani.

-Oye mi amor, quería avisarte de que hoy no podemos quedar.. he quedado con un amigo de hace tiempo, de la escuela para hacer unas cosas. ¿Te importa?

¿Me habrá leido el pensamiento de que me apetecía el domingo para mí?

-No cariño, no me importa.- le digo en un tono neutro, aunque estoy saltando en la habitación de lo feliz que me hace no pasar el día junto a él.

-Vale, te quiero.- dice y cuelga.

¿Él colgando rápido? que raro.. No sé, igual tiene prisa.

Cuando vengo de haber desayunado de la cafetería, decido ponerme la ropa de correr e ir hasta la ciudad que esta a kilometro y medio. Ya preparada, me pongo los auriculares y en spotify decido elegir la opcion de música jazz.

Ya habiendo recorrido medio kilometro, llego al parque central. El parque tiene un lago en la parte de abajo gigante con un puente que lo atraviesa de por medio. Hay muchísimos árboles verdosos y gigantescos. Me quito un casco para escuchar el sonido de los pájaros piando y así me tomo mi tiempo para inspirar el aire puro del parque. Los turistas que vienen aquí a visitar la ciudad, siempre cogen un buggy para hacer una ruta por el parque.

Decido empezar otra vez a trotar cuando de repente veo un buggy acercándose por el mismo camino que el mio. No me impresiono por el buggy, sino por quien está dentro de él. Es Daniel. Parece ser que no me ha mentido con lo de su amigo, porque le veo acompañado con él. Decido acelerar un poco mi trote, pero me freno en seco.