Cap 3

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Ninguna de sus amigas habia ido a clase.

Camino suspirando mientras llegaba al salon de clases.

-me dijeron que te escapaste, Higurashi-san

-Hoyo-kun?

Hoyo no seguia igual que siempre. Eso era un hecho.

-contestame, Higurashi-san - aunque era una orden, su voz sonaba tranquila

- tuve que salir por... motivos personales...- murmuro rascandose la nuca

El gruño por lo bajo.

-que yo sepa, tu hermano no tiene tatuajes...

Kagome lo miro confundida

- estabas con un chico, con un hombre...

Hoyo suspiro echando algunos mechones rebeldesque caian sobre sus ojos hacia atras.

-cuanto tiempo llevo yo pidiendote una cita?- luego la miro- Y el llega y la consigue a la primera?

- Hoyo, ya hablamos de esto. Yo no...

La miro y la dedico una sonrisa triste.

- si es lo que quieres. No vengas a mi cuando el te haga algo...

*que me haga algo?*

Y asi se fue, dejandola sola en medio del pasillo.

-mierda!!! las clases

Corrio hacia el salon con una velocidad inhumana y llego justo antes de que tocara el timbre.

-buenos dias, Kagome- saludo una azabache

-hola Akira-chan

La nombrada sonrio de manera arrogante

-que tal con el Diablo?

-bien. No paso nada.

Akira se echo a reir

-eso ya lo se! A veces es muy raro...

Ahora fue Kagome la que se rio

-solo me llevo a mi casa

- seguro que te dijo algo como "asi se donde encontrarte, asi que no ha sido nada"- comento imitando la grave voz del joven

-algo asi!

El profesor entro y todos los alumnos se callaron.

Las clases continuaron tranquilas, y por fin termino la jornada.

La azabache estaba cansada, se dirigio a su taquilla para dejar los libros que hoy no llevaria a casa.

Cuando se dispuso a salir, encontro a su compañera apoyada en la entrada

-sigues sin tener coche?

-necesito comprarme uno urgentemente

-te llevo a casa?

-si por favor

El camino fue tranquilol

La verdad su apartamento no estaba tan lejos como aparentaba

Cuando Kagome llego se tiro al sofa.

Nada mas quitarse sus estupidos zapatos el timbre sono

Se arrastro hacia la puerta para abrirla.

-Diablo?

El joven suspiro pesadamente

-recuerdame nena, que te diga mi nombre para que dejes de llamarme asi...- comento negando con la cabeza

Llamadas DemoniacasWhere stories live. Discover now