13.Solo un poco más.

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"¡Lily!" escuché a mi madre gritar mientras estaba fuera. Boca abajo, mirando Tumblr después de haber subido una cuantas fotos que hice esta semana. Era raro, mucha gente sabía que estaba en el rancho, pero no esperaba que me pidieran un montón de fotos y selfies. Quería hacer una de esas fotos artísticas con Justin, pero... bueno, ese es el problema. Es Justin. Ugh, esta tan perfecto todo el tiempo que quiero hacerle fotos continuamente y subirlas para que todo el mundo vea lo precioso que es. Juro que los fotógrafos no le hacen justicia. "¡Lily!" volvió a gritar mi madre. Me di cuenta que estaba viendo a Justin quien estaba tirado en la silla de al lado.

Me levanté, bloqueando mi móvil y metiéndolo en el bolsillo trasero de mi short para entrar después a la casa. "¿Sí?" pregunté, en un tono amable bastante extraño ya que suelo ser bastante borde cuando la gente me grita

"Necesito que hagas la colada," dijo mamá. Estaba haciendo limonada otra vez (su reciente obsesión) y no quería hacer nada más. Acepté, yendo hacia la habitación que estaba al lado de la cocina, con la ropa sucia a la altura de la cadera. Estaba todo tranquilo, ya que Emily y Kyle se habían ido en un día de cita para comer y probablemente comprar más condones ya la mi haciéndome saltar. Me giré con un sujetador en la mano y vi a Justin, con cara de dormido pero ahí. Miró el sujetador y sin pensar lo cogió y lo colgó en el tendal.

Sonreí, "¿es tuyo?" preguntó, mirando a la talla del sujetador. "Si, lo es," y él sonrió.

Bufé y le pegue en el brazo, marchándome enfadada pero me cogió, agarrándome con sus brazos levantándome del suelo. "Bájame," dije tratando de no reírme y sonrojarme. Mis piernas daban golpes mientras Justin me subía a su hombro y seguí tendiendo la ropa. "Es divertido," dije sarcásticamente desde su hombro, con una de sus manos en mis muslos para que no me cayera. Vi a mi mama en la cocina riéndose y yo le di una mirada matadora.

"Lo es," dijo Justin con una vox exageradamente feliz. "¿Sabe tu mamá que compras tangas de colores de... Victorias Secret?" dijo Justin, pude oír la sonrisa en su vox. Bufé, bajándome de su hombro. Agarré el tanga y me lo metí en el bolsillo.

"¡Mi madre nos está viendo!" le dije, pero él no se movía. Volví a bufar mientras el continuaba con la sonrisa en la cara.

"¿Te los compraste para mí?" preguntó, tratando de quitarme el tanga, "Sé que lo hiciste," rió mientras le pegaba en las manos.

"¡Quizás lo hice! ¡Para, para, para!" dije rápido, dije agachándome para que no pudiera tocarme.

"No te agachas ya para mi bebé," sonrió Justin, mis mejillas enrojecieron por el apodo. "¿Pensé que nos estábamos tomando las cosas lentamente?" mientras me quitaba el tanga. Mientras lo cogía y se lo metía en su bolsillo.

"Pervertido," susurré, poniendo las manos en mis caderas. Sonrió y se rió. Acabamos saliendo juntos de la habitación. Cuando acabamos de tender la ropa y Justin fue a hacer pis mi madre entró con una sonrisa en la cara. "¿Qué?" dije mientras se acercaba a mí con un vaso de limonada.

"Te gusta," sonrió con un tono de gracia.

"Solo somos amigos mamá," dije bajito mientras bebía mi limonada. Ugh, que rica. Era el punto medio entre agrio y dulce, pero era refrescante.

"No quiere decir que no te guste," sonrió, "Es dulce Lily, conquístalo," sonrió, con su acento marcado mientras hablaba.

Mi padre apareció por la puerta y llamo a mi madre. A veces mis padres son adorables. Cuando papá se estresa siempre llama a mamá y se abrazan y... Hacen otras cosas que quizás no son tan dulces... La cosa es que siempre están el uno para el otro. "¿Quieres limonada cariño?" Sonrío mi madre, agarrando el vaso con el líquido amarillo mientras caminada hacia mi padre. Él aceptó y los dos desaparecieron por la puerta.

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