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(Ya de aquí lo narra el sexy muchacho cx)
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Al día siguiente por la mañana desperté gracias a todo el agetréo que hacía mi padre en mi habitación y mi madre en la planta baja llamando sin parar por teléfono.
Me extrañó que mi padre estuviera en mi cuarto ya que nunca entraba allí, de hecho nadie entraba si yo no se lo autorizaba primero, le pregunte a mi padre el motivo de su presencia a lo cual el respondió:
- Te mudas a un nuevo hogar, no te preocupes, tu madre y yo lo tenemos todo resuelto solo subí a ayudarte un poco con tus cosas. Hazle un favor a tu viejo padre y termina de empacar, te espero con todo allá abajo en una hora.
Dicho esto se levantó de la silla de mi ordenador y se salió.
-Vale, todo bien. No te preocupes que yo lo capté a la perfección y entiendo todo lo que acabas de decir.- Pensé en voz alta.
Me metí a bañar para despertar un poco mi ya confundido y adormilado cerebro.


Una vez fuera de el baño me puse mi ropa favorita, camisa de manga larga a cuadros roja con negro, unos jeans ajustados negros y rasgados de las piernas y por último mis preciadas botas de piel negras y de suela industrial. Ya cambiado y con el cabello aún húmedo baje las escaleras trotando para ver que era lo que traía a mis padres como locos.
- ¿A quien tanto llamas mamá?
- Al centro psiquiátrico.
Me quede con la boca abierta por la sorpresa... Mi cerebro comenzaba a trabajar a mil por hora y caí en la cuenta de que mi madre ya me tachaba mentalmente inestable...
Me fui lentamente a mi cuarto y terminé de guardar mis cosas, baje con mi madre ya con un plan en mente.
- Mamá me siento un poco mal iré a dormir. ¿Ok?
- Claro, pero en cuanto despiertes termina de guardar tus cosas que mañana mismo te vas.- ¡Ahhhh! La loca era ella. Si creía que me encerraría se equivocaba mucho, esa misma noche yo me largaba.
Subí otra vez a mi cuarto y me acosté en mi muy desordenada cama y me hice bolita como siempre, abrasé mi almohadón negro y a los pocos minutos me quede profundamente dormido.

Desperté.
Miré el reloj que tenía en el mueble de alado de mi cama, marcaba las 7:23 pm
Lo cual me daba ventaja de tiempo para comenzar a planear mi escape, por una vez en mi vida sentí miedo de mi mismo al darme cuenta de lo que iba a hacer.

Alessa And BeckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora