Maldita Princesa ( #MC)

Kayler 2

( en la foto Kay)

Kay

Miro a Jazz alejarse de nosotros para atender a otros clientes. Sus palabras se me quedan atoradas en el pecho. De ninguna manera voy a permitir que un idiota la folle y la use. Ella es una chica para respetar. Para amar y cuidar toda una vida. Cualquier hijo de puta que tenga la suerte de tenerla vivirá con una bala con su nombre para su cabeza si la lastima. La miro atender a los clientes y siento como mi polla despierta. Su culo enfundado en ese pantalón claro es una delicia. Perfecto y redondo. Sus piernas son un inferno. Se estira para tomar una botella y deja al descubierto algo de piel de su suave abdomen y siento mis pantalones apretarse. La camiseta que lleva muestra poco escote pero es fácil adivinar sus tetas perfectas. Su cara es un puto sueño húmedo, esos ojos claros, su nariz suave esa boca mullida y besable. El diablo sabe las veces que me imagine enredando mis manos en su pelo de seda para besarla, el diablo sabe las veces que cerré los ojos estando con un culo dulce solo imaginándola a ella.

Por eso siempre la sobreprotegí, por eso siempre amenacé a cualquier idiota que quería algo con ella. No puedo tenerla pero tampoco quiero que sea de nadie más. Soy un hijo de puta pero es así. Desde Selena no volví a dejar entrar a ninguna mujer. Ella era mi todo, era la mujer que amaba y la única a quien quería en la parte de atrás de mi moto usando mi parche. Pero sus padres tenían mucho dinero y le presentaron a un cabron de su misma posición y ella me dejo atrás sin mirarme dos veces. Fue la única vez que me rompieron el corazón y la última. La miro y algo dentro de mí se remueve. Un tipo que no conozco le pide unas cervezas y le sonríe. Tiene pinta de niño mimado con su camisita blanca impecable y sus jeans de diseñador. Él dice algo y ella sonríe pero niega. El vuelve a decirle algo y saca una tarjeta de su billetera y se la da. Ella lo mira y le sonríe de una manera que me hace calentar el pecho. Guarda la tarjeta el tipo le paga con un billete de cien y no le acepta el vuelto lo que le da como 40 dólares de propina, nadie deja ese dinero de propina sin esperar nada. Luego se retira a donde están otros tipos y se queda charlando con ellos mientras sigue con la mirada a jazz.

_ no entiendo si la quieres para ti porque no la reclamas Kay se nota que está muerta por ti_ me dice serio Conor

_ no puedo darle nada_ digo por lo bajo

_ olvida a esa perra de una vez Jazz no es así, ella no te dejaría por nada ni por nadie_ dice serio y luego se levanta_ si no pones tus huevos en su lugar la vas a perder por algún niño bonito_ y se va dejándome con la palabra en la boca.

  Conozco a Jazz desde pequeña, tenía coletas e iba al colegio cuando yo ya tenía mi primera motocicleta. La vi crecer y transformarse en una mujer hermosa. La ayude a mudarse cuando el cobarde de su padre no la defendió de la perra que tenía como esposa y la protegí cada puto día desde que dejo de ser una niña y se volvió un infierno con piernas. Es dulce, tierna, generosa, inteligente y con carácter. Perfecta. Putamente perfecta. La vez que vi a un cabron con ella en la oscuridad de un club metiendo la lengua en su garganta estalle de celos. Le rompí dos costillas y la nariz. Y fue cuando lo entendí nadie que no fuera yo podría tocarla. Pero entonces yo tampoco la tocaba. Ella querría amor, querría una relación normal yo estaba bastante seguro de no poder volver a enamorarme nunca. Los demás miembros del club llegan y salimos de la barra para sentarnos en nuestra mesa de siempre. Los culos dulces enseguida se acercan y comienzan a tratar de buscar con quien pasar la noche. Ría se me acerca y pone la mano en mi pecho

_ hace mucho que no la pasamos bien Kay_ me susurra con voz sugerente bajando la mano hacia mi muslo. Un par de veces me la folle y ella se creía con derecho a tocarme cuando no la buscaba. Entonces veo la mirada de Jazz dirigirse a mí y a la mano que Ría pone en mi entrepierna, se muerde el labio y cambia la mirada de lugar. Le dice algo a Ripley y sale para el baño. Veo al niño mimado clavarle la mirada en el culo y levantarse para ir detrás de e ella y me tenso

_ vamos a la oficina Kay_ dice Ría y me levanto de golpe para sacármela de encima

_ olvídalo_ digo y salgo para los baños.

Cuando llego veo al niñato retener a Jazz y ella parece molesta me acerco y escucho

_ vamos solo un beso, desde que te vi que me vuelves loco_

_ déjeme ir por favor tengo que trabajar_ dice ella y trata de zafarse pero el tipo la retiene y mi pecho arde de furia

_ DIJO QUE LA DEJES IR_ digo suficientemente algo y el niñato salta y levanta las manos en señal de rendición y se aleja. Ella respira aliviada.

_ Gracias..._ susurra y se aferra a mi pecho. La abrazo y hundo la nariz en su pelo. Huele a vainilla y a flores dulces. Levanta su mirada hacia mí y lame sus labios con suavidad y sé que quiere que la bese. Me separo de ella despacio y le digo

_ Vuelve a la barra_ y me doy vuelta pero ella me detiene con su mano en mi brazo, me doy vuelta para mirarla

_ bésame Kay_ dice y siento mi polla endurecerse hasta el punto de dolor

_ no te veo así Jazz, eres como una hermanita menor para mí, jamás podría tocarte de otra manera_ le miento por su bien. Veo sus ojos llenarse de lágrimas, se da media vuelta y vuelve al baño. Y me siento un infeliz.