El Diario De Una Cabrona

Agosto.

Era una noche estrellada de verano. Una noche encantada. Una noche mágica y loca. Y, al mismo tiempo, una noche como otra cualquiera.
Eva estaba en su habitación, tirada en la cama y escribiendo por whatsapp a su actual novio. Ella sabía que eso no iba a durar y no se tomaba en serio su relación, ¿qué puede decir con 17 años?
Su novio era encantador; listo, atento, cariñoso, romántico, fiel... Lo que todas buscábamos. Sin embargo, Eva nunca había tenido una relación de más de un mes y él nunca había tenido novia.
Ella no sólo hablaba con él esa noche. También hablaba con otro chico totalmente opuesto a su novio pero muy similar a Eva; era un chico que no duraría ni un día con novia, guapo, malo, sin estudios... El típico macarra de toda la vida. Eva sentía una atracción por él muy fuerte pero, a la vez, no quería defraudar a su novio porque no quería perderlo.
Por lo que, al día siguiente, no pudo evitar mandarle a Brandon ("el macarra") un mensaje con la finalidad de verse. Él aceptó, pero sería ella quien debería ir hasta él. A Eva no le importaba, lo único por lo que se preocupaba era por la excusa que le pondría a Damian (su novio). Como no es una chica con un don para la imaginación, sólo pudo decirle que iba a ver a una amiga suya que vivía en la ciudad de al lado. Damian era tan bueno y estaba tan enamorado que se lo creyó; pero, de bueno era tonto.
Cuando Eva llegó al encuentro y vio a su posible amante, se le aceleró el corazón pero intentó ocultarlo y se limitó a saludar con la mano.
-¿Te comió la lengua el gato?.- Bromeaba Brandon.
-Ya le gustaría a él.
Sólo esperó al intercambio de dos frases para que él se abalanzara sobre ella. Sin embargo, Eva se negó y se hizo la dura. Él siguió insistiendo sin resultados hasta que, desprevenido, Eva se abalanza sobre él y estalla una nube de besos y todo lo que tú puedas imaginar en una primera cita y en un parque.
Al terminar ese día, Eva sentía que por fin se iba a entregar a alguien y era a Brandon. Mientras tanto, Damian seguía en su casa esperando un mensaje de su novia que había ido a ver a su amiga.
Dicen que tarde o temprano todo se descubre y Damian descubrió lo de Brandon con su novia. Él se lo perdonó pero, Eva sólo quería estar con el desenfreno y la pasión de Brandon.
Estuvieron hasta el final del verano intentando una relación que no funcionó. Eva estuvo con otros y Brandon con otra chica.
Ella sentía que era la hora de amueblar su cabeza que, por una vez, tenía que ser seria y decidió llamar a esa persona que podía aportar a su vida una estabilidad emocional.