Saint Seiya: Sombra Calatía - Parte 2 ||TERMINADA||

Cicatrices del pasado

Una mujer caminaba por los pasillos siendo bañada con la oscuridad que las paredes otorgaban, era tan silenciosa, una habilidad que se había ganado por la experiencia...movía sus cabellos grises Oxford casi por elegancia sus ojos hacían juego con él, eran de un color anaranjado que casi rimaba con su maldad propia...el ruido de su caminar era sigiloso y a pesar del peligro al que estaba expuesta. Siguió caminando hasta toparse con alguien que aparentemente la estaba esperando.

-Hasta que llegas Mabel.- Le dijo un tono tosco de voz. La mujer se arrodilló dejando caer sus cabellos oscuros por los costados de su rostro.

-¿Por qué me citó mi señor?.- Decía la voz sumisa de siempre.

Morfeo sonrió maliciosamente antes de levantarle la barbilla y mirarle esos ojos azafranados.

-Mi padre y por el momento ni mis hermanos tienen que saber lo que estoy planeando...necesito que me traigas a alguien...ya te explicaré con más calma de quien se trata.- Le soltó la barbilla.

Mabel después de una señal que le indicaba su señor, se levantó observando con detenimiento a Morfeo quien le daba la espalda ahora.

-¿Quiere que le traiga a Nubia?.- Preguntó con el tono seco...aún no se le olvidaba que la oji lila estaba por estrangularla.

Sí...la Corónide que se creía era Mabel, la servidora de Morfeo.

-No, ella recibirá su merecido después, a quien quiero que me traigas es a otra persona...

Mabel arqueó sus cejas con gresca.

-¿Esa persona...es para hacerle mal a Nubia?

-Sí...ya que mi padre me ha prohibido acercármele tengo que buscar otra forma indirecta para hacerla sufrir...

Mabel sonrió con malicia, ese plan le agradaba incluso más que el primero.

-¿Cuándo quiere que lleve a cabo el plan?.- Le preguntó afable y Morfeo se le acercó tomándole de nuevo de la barbilla y levantándola hacia arriba, quería que ella le viera a los ojos fijamente y como es más alto que ella tuvo que hacerlo.

-Cuando quieras...tómalo como un atributo que te ofrezco por tus leales servicios...es más, si quieres divertirte de nuevo...lo puedes hacer, tienes todo mi consentimiento...

-Mi señor...le seré leal siempre...usted es mi amo.- Le tomaba de las muñecas con delicadeza.

-Muy bien, me gusta escuchar eso...

Mabel sonrió más con malicia y asintió con la cabeza, la sola idea de recordar todo el daño que había provocado le satisfacía y ahora que Morfeo de nuevo le daba su consentimiento tenía muchos planes que llevar a cabo...eso le excitaba.

-Una cosa más Mabel...lo que te voy a pedir necesita un poco más de habilidades...-Le decía sin apartarle la vista mientras le quitaba las hombreras de un tipo vestido dejando completamente los hombros desnudos los cuales fueron acariciados con el tacto del dios...pronto ocuparon espacio sus labios que recorrían el cuello de Mabel sin consentimiento y a pesar de que estaba siendo tosco con sus tactos poco le importaba a la chica, después de todo él era su amo y ella estaba dispuesta a hacer lo que fuera...

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7:45 p.m

Kanon estaba que se caía de sueño...sí, seguía levantado, estaba cansado por lógicas razones que no le habían dejado terminar su fugaz romance clandestino, a veces miraba con cólera a la pelirroja que de no haber sido porque ella se subió justo después de él nada de esas rabietas mentales estarían sucediendo ¿por qué las mujeres eran tan molestas y complicadas? Por eso Kanon prefería cero compromisos y más flirteos sexuales si cambiaba su forma de comportarse terminaría como su hermano Saga o como Aioros, dolido y con la sensación de sentirse traicionado por una persona a la que estimaban...el resumen, las mujeres complicaban todo...