Prostituta a temprana edad.

Celos.

Ya han pasado tres años de aquel encuentro con Marx y, como prometió, no nos ha dejado sola, pero solo permito que me de la mensualidad de Mia, como no tengo ningún compromiso con el, no quiero recibir nada del mismo. He seguido en el prostíbulo y ya solo faltan seis meses para terminar mi carrera, ¡Dios, que emoción! A muchos esfuerzos, pero lo conseguí.

Marx y yo hemos seguido siendo amigos, he tratado de poner distancia entre nosotros, pero eso hace que me enamore cada día más, no les negaré que de vez en cuando nos damos unos que otros besos, nos amamos, no se los negaré, pero de ahí a pasar a otra cosa, no! Me sentiría fatal si me acuesto con el hombre de mi vida siendo una prostituta, pero él aún no lo sabe, ni Any, ni Óscar ¡Gracias a Dios!

El dinero que me da Marx para la bebe, lo uso para pagar su colegio, si, ¡Está en el colegio! Y se ve hermosa con su uniforme, también pago su niñera, su transporte y su comida, no uso nada de ese dinero para mi y así se lo he hecho ver a Marx, ya saben porque. El no se ha cansado de pedirme que estemos juntos, que el me ama y que hará todo lo posible para enamorarme, ¡Ay, si tu supieras que doy más que la vida por ti! Eso siempre lo digo en mis pensamientos, claro está, pero yo decidí que cuando termine mi carrera y la comienze a ejercer, entonces me daré una oportunidad con él, pero mientras tanto es mejor, ser amigos.

Hoy iremos al centro comercial, Marx, Mia y yo, a comprarle cosas a la bebe, compraré algo para mi y el comprará sus cosas también, como toda una familia, que bonito!

Últimamente estoy mas bonita, ya que tengo más tiempo para mi y voy al gym. Para hoy opté por un short naranja y un abrigo blanco muy pegado al cuerpo, pero muy ligero y unos zapatos del mismo color, con el pelo suelto y sin maquillaje! Fenomenal! Le doy de desayunar a Mia, la bańo y la cambio, ya mi bebe tiene tres años y dentro de poco cumple cuatro, está muy hermosa y muy gordita. Cuando terminamos de todo, me roceo mi colonia de Victoria Secret y a la bebe su colonia de niña, cierro todo y bajamos, el desesperado está tocando bocina.

Llegamos al Mall y no evito ponerme celosa con las miradas que le dan a Marx y él, de sinico, se las devuelve, no puedo negar que está tremendamente guapo con ese polo azul cielo y esa bermuda color caquie ¡Jesus Manifica! Entramos a la tienda de bebés y me vuelvo loca con todo lo que veo para Mia, Marx solo ríe ante la ocurrencia de la bebe, se llevan muy bien esos dos! Yo escogí un conjunto verde limón con blanco, que a mi beba le queda hermoso. Cuando terminamos de Mia, entramos a una tienda de mujer y yo comienzo a escoger algunas cosas que necesito, como panties, bikinis, sostén, etc... Y otras cosas que quiero como un vestido negro, de mangas largas y que me llega hasta la rodilla, en la cintura tiene un lazo dorado muy hermoso, entro a medirmelo y cuando salgo a enseñárselo a Marx, él solo dice:

- Que bien te ves mujer mía- yo suelto una carcajada ante su comentario y para mi, digo, y que bien me cae ese apodito querido. Salimos de comprar todo lo mio y entramos a una tienda de hombres, ahí veo una camisa roja con blanco, de mangas cortas, que de seguro le quedará perfecta a Marx, se la paso y él va y se la mide, cuando sale a enseñarmela la boca de me hace agua, que bien se ve el padre de mi hija ( por no decir otra cosa). Un muchacho muy amable se pone a hablar conmigo en lo que Marx y Mia compran cosas.

- Que hermosa eres, estaría encantado de salir contigo- me dice el muchacho y cuando veo a Marx, está más rojo que un tomate y eso, que el pobresito es de color indio. Yo me parto de la risa al ver el semblante Marx, ¿Estará celoso? Pero como quiero hacerlo enojar continuo hablando con el muchacho y para más chula, lo halago también.

- Tu también te ves muy bien, me encanta tu pelo- le guiñó un ojo al muchacho, ya le dije que le quiero dar celos a mi ''Esposo'' por algo que me hizo ayer y él, ni corto ni peresozo, me sigue la corriente. Así seguimos halagandonos hasta que Marx interrumpe.