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Las semanas habían pasado lentas en la vista de ambos, la rutina de dormir en el sofá y la habitación había continuado, y cada vez que Harry intentaba dormir en el sofá y que Louis durmiera en la cama, Louis lo echaba de ahí en mala gana, encubriendo las verdaderas intenciones detrás de ello, nunca dejaría que Harry se levantara con el cuello lastimado por culpa de un maldito sofá.

Ninguno de los dos se había atrevido a hablar sobre algo, Louis se había escondido en su trabajo en el hospital, a veces ofreciéndose a cubrir los turnos de noche, incuso si era demasiado tenebroso el hecho de un hospital en la noche. Por su parte, Harry se escabullía detrás de sus libros literarios, dejó de salir con Niall, mas bien, dejo de salir con todos en realidad. Sabía que solo tenía sus días contados en aquel precioso departamento, el cual muchas veces había imaginado que era su castillo, donde vivía con su príncipe de ojos azules, el cual lo había salvado de la terrible buja y su abominable dragón.
Pero todo tiene un fin, y Harry estaba llegando al final de su cuento, uno con un final triste.

Abrieron la puerta de la habitación de golpe, asustando Harry – Lo siento – se disculpó el oji-azul – solo venía por mi ropa – Harry lo miró con ojos asustados, y Louis sintió la necesidad de aclararle las cosas – pasado mañana es navidad, así que me voy a Holmes Chapel – Harry asintió sin decir nada, sintiéndose aliviado al saber que no se iría del departamento para siempre. Observó como Louis salía de la habitación, llevando y trayendo cosas para poner en la maleta, cuando su teléfono sonó, Harry observo como la fotografía de Jay aparecía en la pantalla, se preguntó si Louis se enojaría si contestaba su teléfono, pero de todas maneras lo hizo.

-¿Bueno? – contestó, mirando hacia la puerta donde se escuchaban los pasos de Louis viniendo hacia la habitación.
-¡Harry! – Gritó con entusiasmo – me alegra oír tu voz, corazón, los estamos extrañando mucho ¿ya vienen en camino, por eso Lou no me contestó? – ¿Qué mierda? Pensó, ¿acaso Louis no le había dicho a su madre que terminaron?
-Uhm, no en realidad, Louis está preparando su maleta para ir – Decidió que Louis debía ser el que le dijera a su madre sobre lo que pasaba con ellos.
-Ese chico, dejando todo para el último momento – casi podía sentir a Jay rodando los ojos fastidiada pero divertida a la vez, Louis se apareció en la puerta, y lo observó con el ceño fruncido. –bueno te dejo, Harry, aun debo preparar todo para la víspera de navidad mañana, y el cumpleaños de Louis, ya sabes. – Harry asintió aunque sabía que Jay no podía verle, y luego ella colgó. Vio a Louis con algo de vergüenza y le tendió el teléfono. Louis lo puso en el buró y se acercó a él.

- Necesito un favor Harry – lo miró con aquellos ojos de cachorro – quiero que vengas conmigo a Doncaster, necesito que finjas ser mi prometido hasta que el año nuevo pase y volvamos a casa, yo no quiero decirle a mamá que terminamos, ella hará preguntas y realmente no quiero pasar la navidad con mi madre y hermanas de esa manera. Mark lo sabe, el sugirió esto, sabe como es Jay.

Harry lo miró por algunos segundos antes de sonreírle, asintiendo lentamente, Louis también sonrió, poniéndose a su altura – ya que Harry estaba sentado en la cama – y sacando el anillo de su saco, ambos se miraron a los ojos y Louis deslizó lentamente el anillo en su dedo.

-Gracias. – Murmuró y se levantó de su lugar – empieza a empacar, Hazz, nos vamos en una hora y el camino es largo.

Louis había estado pensando en lo que dijo Zayn, sabía claramente que Harry nunca lo engañaría, y también sabía que probablemente necesitara algo de ayuda, pensó en un psicólogo, pero tal vez Mark era su mejor opción, le contaría la razón de su rompimiento, y vería como razonaba el hombre, solo lo había defraudado una vez en la vida hace ya tantos años, no lo creía capaz de hacerlo de nuevo.

fluffy »l.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora