¿Por que no?

Te Echo De Menos

¡¡Me estaba besando!! ¡¡¡El que podía ser el amor de mi vida me estaba besando!!!
Se separo de mi. Yo apenas podía articular palabra, pero el hablo con toda la seguridad del mundo
-¿Ahora crees que me importa la edad?

-¡M...Me has besado!- dije sin poderlo creer aún- ¡Joder Manu que me has besado!- repetí gritando y riendo como una boba
-Y si quieres lo puedo volver a hacer, claro esta, si tu me dejas
Y antes de que el me pudiera besar ya le estaba besando yo. Sus besos sabían tan dulces.
-Te quiero desde hace dos meses Elia. Ya no podía aguantar más estas ganas de tenerce cerca, de sentir tus besos, tus caricias, tus abrazos, tu respiración. Te he necesitado y ahora no te voy a dejar escapar. Te quiero mi vida- dijo y me beso mientras sus brazos rodeaban mi cintura.
-¿Nos vamos?- pregunté separándome de él
-Lo que tu quieras preciosa
Y de la mano bajamos las escaleras de aquella casa en ruinas y montamos en su moto. Cuando llegamos a la puerta de mi casa me quité el casco y el hizo lo mismo. Me dio un corto beso en los labios y me guiñó un ojo.
Se despidió de mi y se fue.
Saque las llaves, entré a mi casa y me puse cómoda. Hice palomitas y puse una película. Cuando acabó le mande un WhatsApp que decía:
-Te echo de menos. Espero verte pronto. Un beso
A los cinco minutos me llegó un mensaje:
-Yo también. Eso espero. Otro beso para ti rubia
Realmente lo echaba mucho de menos y solo lo podía ver una o dos veces a la semana y solía ser en finde ya que vivía a quince minutos de mi y mis padres me pillarian. Hasta que lo nuestro no fuera serio no les podía contar nada.
Pero tarde o temprano se enterarían de todo. Y si no era por mi sería por otra persona.