Angel Rebelde (Terminada)

Una vida.

40.

Aunque sabia que esto se habia convertido en una completa mierda, me gustaba. A pesar de que desobedezca a mi madre, a pesar que me estoy comportando como una colegiala rebelde y mi madre no me quiera volver a hablar, estoy segura que no me importa, porque con Justin tengo todo.

Justin aun esta muy tenso, tomo su mano para entrelazar sus dedos con los míos, me lanza una corta mirada y sonrie levemente. Nunca habia sentido esto, pero me siento extraña, quiero decir, nunca habia dependido de un hombre, nunca me habia sentido que sin esa persona no podria seguir, nunca me habia sentido enamorada. Esto es maravilloso. El es maravilloso.

Se gira sin expresión cuando estamos fuera del edificio. Toma mi rostro con lentitud y su pulgar hace algunas caricias en mi mejilla, creando que no me quiera bajar del auto nunca.

- Jus... - Jadeo.

- ¿Sabes que te amo, verdad? - Una sonrisa aparece en mi rostro. - Nunca te vayas ¿ok? Eres el centro de mi mundo, realmente eres mi mundo. - Sus ojos comienzan a ponerse rojos - Se que tu mama tiene razón, pero aún así soy egoísta y no te imagino con algún hombre que no sea yo. Te amo, con todo mi maldito corazón, nunca me dejes.

Trago saliva, nunca lo había visto tan vulnerable, con tanto temor en sus ojos y voz.

- Jus... Nunca te dejare, quiero que sepas cuanto te amo. No podría seguir sin ti, pongo mi corazón en tus manos, porque tu eres mas que mi mundo... - Una risa ronca sale de mi garganta. - Eres mi universo. No pienso en otra persona perfecta para mi, eres mi alma gemela, no creo que exista alguien mas que tu. Realmente no creo que haya alguien mas que pueda sacarme tantas cosas cursis. - El fue bajo. Este momento es tan especial y solo nosotros dos. - Quiero que seas el padre de mis hijos. - Y con esto observó como su mirada cambia, en sus labios solo encuentro una sonrisa sincera y de completa felicidad.

El besa mis labios con lentitud.

- Te amo, pequeña. Cuidate mucho, eh.

- Lo hare - Me separo de el, volviendo a la realidad. A mi trabajo. Beso su mejilla. - Adios, Jus.

Salgo del auto, estoy a punto de cerrar la puerta cuando.

- Termina con ese tipo. - Un nudo en mi garganta aparece.

- Lo haré.

En medio de mi laborioso trabajo me llega una imagen a whatsapp de Justin. Sonrío, entro a la aplicación y me encuentro a un Justin tomándose un selfie en Starbucks, justo a la hora de mi almuerzo. El sabe como ser perfecto. Su rostro es perfecto, lleva una sonrisa y me enseña un chocolate que debe ser para mi.

El es perfecto.

Llego al Starbucks tan conocido para mi,  tapo los ojos de mi chico perfecto y me acerco con lentitud a su oreja.

- ¿Quien es tu chica sexy?

- Depende. 

- ¿De que?

- De quien seas. - Le pego en el hombro mientras comienza a reír. - Shandy es mi chica sexy.

Conversamos y pasamos una buena tarde entre galletas, chocolates y haciendonos bromas. Pero su sonrisa se borra y cambia a una de confusión.

- Shandy, terminaste con Bruke... - Su voz no pregunta ni afirma, solo sale un poco temerosa. Me remuevo en mi asiento.

- No, todavia no lo he visto, ademas estoy en horas de trabajo, no creo que sea apropiado.

Aunque todo lo que dije es verdad, no tengo cara para romper con el, realmente tengo mucho miedo en romperle el corazón, se cuanto duele. A mi Justin me lo rompio, pero lo logro construir otra vez con caricias y amor... mucho amor.