Mi Dulce Obsesión

me perteneces (2/2)

Rápidamente tomo al rubio de la mano y lo condujo hasta la habitacion, cerro esta con seguro y lanzo a su pareja a la cama, quien algo asustada observaba al mayor, saitama. - p-puedo explicarlo -

- ¿explicar que? - camino hasta uno de los muebles de da habitacion para rebuscar algunos objetos entre los cajones. Sonaba serio, no se veía alterado, pero las apariencias engañan. - ¿explicar que me has engañado?, ¿que te has dejado manosear por otro hombre, y que seguramente te acostaste con el? -

- ¡no es asi! - alzo su voz el cyborg mientras se incorporaba sobre la cama.

- ¡no mientas! - grito alterado, para luego suspirar pesadamente, debía controlarse para no despertar a su hijo. El cyborg guardo silencio, sin saber que hacer, su visión se estaba nublando, iba a llorar.

- pensaba usar esto en una mejor ocasión - saco los objetos que tanto buscaba para ponerlos sobre la cama. - pero tendré que usarlos esta vez y enseñarte una lección... - el menor limpio sus lagrimas para ver a que se refería su pareja. Juguetes sexuales, eso es lo que eran; esposas, vibradores de diferentes tamaños, algunas sogas y vendas, entre otras cosas.

- p-pero.. - Murmuró el rubio mientras unas cuantas lagrimas escapaban para deslizarse por sus mejillas.

El mayor estaba tan dolido como el menor, podría decirse que incluso mas, pero en este momento se estaba dejando guiar por su enojo. Pensar que la persona en la que tenia absoluta confianza, y amaba con todo su corazón fuera marcado por alguien que no fuera el, el tan solo pensarlo nuevamente comenzaba a enfurecerse. Esposo al rubio a la cama prosiguiendo a vendar los ojos del mismo, sin que pudiera siquiera intentar detener sus acciones.

- hoy no seré suave.. - susurro en el oído del cyborg el cual agudizaba sus sentidos al ser privado de su visión. El mayor, saitama se acomodó lentamente sobre el cuerpo del cyborg abriendo las piernas del mismo, de un solo jalón se deshizo de la camiseta del rubio rompiendo la misma, lo que vio lo hizo enojar aun mas, el pecho y abdomen de su pareja marcado por alguien mas... Eso lo estaba irritando y cada vez mas.

- sens-.. - el mayor lentamente iba privando al cyborg de su libertad, esta vez cubrió los labios del rubio, obligando al mismo a abrir su boca para introducir una pequeña pelota, la cual en sus extremos contenía dos correas de color negro que fueron amarradas por detrás de la cabeza de genos, despojandolo asi de emitir palabra alguna.

Bajo hasta el cuello de su pareja para morder este con fuerza, dejando sobre las marcas que habían con anterioridad, sus propias marcas, marcas bastante visibles de sus dientes, los cuales le sacaban unos cuantos chillidos de dolor al cyborg, los cuales eran distorcionados a causa de la obstrucción que se encontraba en su boca.

Al tener completamente marcado el cuello del menor, prosiguio a bajar hasta el pecho y abdomen del rubio, volviendo a repetir sus acciones la cuales incluso fueron ejercidas en la pelvis del cyborg lo cual le hizo soltar un notable y mas fuerte gemido de dolor, podía sentir un fuerte ardor en las parte en las cuales habia sido mordido por el mayor, saitama, quien aun continuaba marcando mas y mas su cuerpo.

Despojo de un rápido movimiento al rubio de su pantalón sin siquiera tomarse el tiempo de desabotonar el mismo. Abrió las piernas del cyborg ante el, tomo el lubricante y derramó un poco de este en uno de los dildos de un tamaño casi normal, ya habiendo lubricado el aparato, comienza a introducir este lentamente en el interior del menor haciendo gemir al mismo, nuevamente de dolor al no haber sido preparado correctamente.
- ¡mh! -

Saitama, al ver la reacción sonríe malicioso y prosigue a encender el aparato, haciendo vibrar aquel objeto que habia introducido anteriormente en la entrada de su pareja, la cual solo se limitaba a gemir, encorvando su espalda ante aquella extraña sensación que le producian las vibraciones.