La apuesta [HunHan]

Miradas

Sehun

Ví como el nuevo se dirigía a su asiento junto a ese chico que lo miraba con una sonrisa de oreja a oreja, - supongo que ahora tendrá un amigo nuevo - pensé; se presentó y luhan le respondió con una sonrisa.

Abrió la cremallera de su mochila y comenzó a sacar lo necesario para tomar notas y enseguida prestó atención al aburrido del profesor, en cambio yo observaba su perfecto perfil, - debo obtener su número, al parecer ya no tendré que llamar al estúpido de Baek - de inmediato la mirada de luhan se encontró con la mía y me hizo salir de mis pensamientos, en un momento creí que sonreiría, como todos lo hacen, pero me sorprendí un poco al observar como su expresión cambió y parecía apuñalarme con la mirada, rápidamente volteó su rostro hacia el pizarrón

- vaya, al parecer no será tan fácil conseguir su número - pero que estoy pensando, a mi nadie me niega su número ni mucho menos salir conmigo, todo lo contrario, el que dice "no" soy yo, y él no será la excepción.

Luhan

Whoah! - suspiré mientras contemplaba la piscina del instituto, era enorme y el agua estaba cristalina, si hubiera llevado ropa para cambiarme, no lo habría pensado ni tres veces para lanzarme a nadar.

- Si, lo sé, es gigante - rió xiumin - lástima que no sé nadar, así que solo debo observarla de lejos - volvió a reír

- Pero yo te puedo enseñar -  le dije con voz suave - si quieres - y de pronto su mirada se iluminó como si le hubieran dado la mejor noticia del mundo

- Claro que si - dijo emocionado - ven, vamos a comer algo - me tomó de la mano y me guió hacia la cafetería.

Sehun

- Y ¿que tal el niño nuevo? - preguntó kai con una sonrisa maliciosa - porque dejame decirte, que lo encontré bastante bueno - rió

- No está mal - le respondí con indiferencia

- Hablando del susodicho, mira quien viene entrando - me señaló con su mirada hacia la entrada de la cafetería, y giré mi cuello para verlo entrando de la mano con su nuevo amigo

- Por aquí - le señaló Luhan, una mesa mas allá que la mía, así que podía observarlo sin problemas, aunque tampoco me interesa

- Esperame iré a buscar mi pastel preferido, ¿quieres uno? - le dijo el chico emocionado

- Si por favor - respondió Luhan cortésmente.
Dicho esto su amigo se dirigió al mesón para pedir los pasteles, dejando a Luhan solo, - ahora es mi oportunidad - pensé cuando me estaba levantando de mi asiento para ir hacia él.

Luhan

- Por aquí - le dije a Xiumin, señalando una mesa desocupada

- Esperame iré a buscar mi pastel preferido, ¿quieres uno? - me preguntó amablemente, ahora me preguntó ¿donde están sus amigos? me gustaría conocerlos

- Si, por favor - le respondí gentilmente - y se fué a hacer el pedido, dejandome solo; aproveché a observar el lugar, era bastante espacioso y habían muchas flores de decoración

De pronto veo al chico que me miraba fijamente en clases como  un león a punto de lanzarse a su víctima - ¿cuál es su problema? - pensé al ver que continuaba mirandome de la misma forma.

Es bastante lindo no lo negaré, cabello color miel, piel blanca, un poco más alto que yo, un cuerpo bien detallado, una mirada asesina que me irritaba y al mismo tiempo lo encontraba sensual, unos labios comestibles a simple vista, era simplemente perfecto; pude notar que era bastante popular, pués, miré a mi alrededor y varías personas dirigían su mirada lujuriosa hacia él; sobre todo ese chico que me preguntó a cerca del por qué mi mudanza a Seúl, y al parecer no le caí bien - que pasa con esta gente - pensé irritado.

Me sonprendí cuando el chico con mirada intimidante se levantó de su asiento, con sus ojos puestos en mí, sentí que mi pulso se aceleraba y mi respiración era un poco dificultosa - calmate Luhan - dije en susurro para mi mismo, pero de nada sirvió ya que los nervios aumentaron cuando el chico se venía acercando, miré hacia donde estaba Xiumin y todabía estaba indeciso escogiendo el pastel - no puede ser - pensé.

- Hey - escuché una voz suave que provenía de ese chico, que ahora me miraba indiferente

- Qué - le dije cortantemente, no suelo ser así, pero él ha estado fastidiandome con su mirada y ya estaba cabreandome
se rió - no le veo la gracia - pensé mientras lo miraba desconcertado - ¿De qué te ríes? -  le pregunté algo molesto

- Nada, solo que eres la primera persona que me responde con un "Qué"- y volvió a reír - como sea, dame tu número - lo dijo como si fuera una orden

- ¿Estás de broma? - le dije incómodo por su "petición"

- No.- lo dijo como si nada - pero que se cree.-

- ¿Y por que tendría que darte mi número? dije con voz desafiante

- Por que yo lo digo - su respuesta me dejó en la nada misma - ¿es en serio?

- Já. esa no es una respuesta y no te daré mi número - dije molesto por su actitud tan engreída

- O me lo dás a las buenas o me lo dás a las malas. Tú escoge, aunque yo preferiría la primera - me lo dijo serio para luego sonreír de lado maliciosamente - pero que pasa con este tipo - pensé ya sofocado con la situación

- Pier de te - le respondí en sílabas, pude notar que se sorprendió un poco, al parecer no se esperaba esta respuesta, luego de unos segundos en donde me observó con una expresión neutra, se dió la vuelta y se fué de la cafetería.

- Que rayos fué eso - pensé bastante descolocado por lo que acababa de suceder, y cuando creí que no me sentiría más incómodo, me percato de varios ojos mirandome, algunos sorprendidos, otros coquetos y sobre todo el de ese chico, que me aniquiliba con la mirada.