Única.

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Ambos chicos, tanto SeHun como KyungSoo pertenecían a la misma manada, siendo sólo amigos ya que ningún lazo familiar se hacía presente entre ellos.

SeHun era él hijo menor del alfa, luego estaba ChanYeol y YiXing, éste último siendo el mayor. Todos eran alfas en potencia por tener la sangre "noble", incluso dos de ellos parecían ser alfas... Menos SeHun, el muchacho parecía no ser más que un Omega, sus padres estaban seguros de que solo era cuestión de tiempo para que creciera y su cuerpo se amoldara a una figura mucho más temible, pero el tiempo corría y no se podían centrar en su pequeño hijo.

~♡~

- Kyunggie... ¿Has escuchado él rumor?

El mencionado se dió la vuelta, sus orbes se detuvieron en aquel pequeño niño.

"SeHun volvería", pensó.

Hoy era él día, los alfas volverían y eso traía a todos demasiados alterados. Luego de tantos años sin tener la presencia de sus amigos se había vuelto un tanto más serio pero nada que no pudiera solucionarse.

No fue hasta que de un auto completamente negro un muchacho de pelo color plata bajó. Era alto y bastante esbelto, con un perfil fuerte y definido, su gran espalda parecía perfecta para treparse en él.

Todos aplaudieron una vez llegaron con su padre, la ceremonia improvisada se le hizo aburrida y sin dubitar volvió sobre sus pasos para llegar al lago. No podría saludar a sus amigos sin hacer una larga fila esperando llegar a ellos después de que pasarán cada uno de los miembros de la manada.

Se sentó en la orilla del lago y suspiró. Los había extrañado muchísimo, en especial a su enamorado. SeHun le había hecho la promesa de no alejarse cuando eran niños, y la había roto por una fuerza mayor, pero no era aquello lo que lograba entristecerlo, al volver elegirían las mejores parejas para ellos, incluso podrían escoger algún miembro de otra manada vecina para unir lazos.

Siendo sinceros, no creía que alguno lo escogiera. Era uno de los Omegas más malhumorados, no sabía hacer muchas cosas aunque aprendía rápido y sin duda sería una mala pareja para un Alfa.

- Hola, Soo.

La voz tras su espalda lo hizo asustar, pero al darse la vuelta se encontró con aquel hermoso joven del que alguna vez estuvo enamorado.

- Ho-Hola... Tu, mh ¿No deberías estar con los demás?

- Quizás, vi que te fuiste, pensé que nos habías extrañado pero, quería hablar contigo a solas.

KyungSoo alzó sus cejas, curioso. SeHun se sentó a su lado y tomó sus manos llevándolas a su cabello color plata.

- Extrañé esto. -Murmuró SeHun a la vez sus ojos se cerraban sintiendo los tibios dedos ajenos frotar su cabello.

- No puedo creer que te acuerdes, Hun.

- Sí, después de tantos años, creo que necesitaba estos. Mh, además me relaja. Va a ser una semana muy ocupada.

-Las alianzas ¿Verdad?

El movimiento de cabeza lo hizo suspirar, era en todo lo que pensaba desde que habían vuelto.

- Y... ¿Ya sabes a quién elegirás? -Preguntó KyungSoo nervioso. SeHun negó con su cabeza a la vez pasaba sus manos por su espalda hasta posarlas en su cintura.

~♡~

La ceremonia había empezado, todos estaban felices pero él... Los pocos minutos al día que había logrado pasar con SeHun lo habían hecho recordar que era lo que había visto en él.

El tiempo pasó y los dos alfas, ChanYeol y Yixing ya estaban con sus parejas, en cambio SeHun no. Se había dado cuenta que no dejaba de mirarlo y luego veía a su padre, indeciso.

De repente, toda la ceremonia se detuvo y SeHun pasó a tomar su forma lobuna, bajó de aquel improvisado escenario y con pisadas lentas y firmes se abrió paso entre las personas, hasta que se acercó a él, lo estaba escogiendo, nunca nadie lo había hecho. Las personas empezaron a murmurar a su alrededor a la vez SeHun jalaba suavemente de su ropa para hacerlo subir al escenario.

La ceremonia concluyó y aún no podía creerlo. Tomó la mano de SeHun una vez volvió a ser humano y se sonrió.

- ¿Hice bien?

- No lo sé, pero me hace feliz... Pensé que nunca lo harías, SeHun. -KyungSoo terminó por acortar la distancia hasta abrazarlo, escondiendo su rostro en su pecho mientras algunas lágrimas se deslizaban por su mejilla.

SeHun tomó su rostro entre sus manos y con cuidado besó por primera vez aquellos hermosos labios. Al fin podrían estar juntos, después de todo ya nadie podría alejarlo de su ser.

Su vínculo sería eterno desde aquél día.

The Lucky One {HunSoo}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora