A veces olvido respirar

El ritual

Después de que Marsec tomo una gota de sangre, de mi dedo pulgar, comenzó a silbar como mi mama por las mañanas, y no dejaba de caminar por la habitación buscando algo, movía y movía libros cubiertos con polvo viejo y hojas ya rasgadas por el tiempo, no dejaba de silbar y eso empezaba a taladrar mi cabeza.

-Vasta quieres!! -dije ya enfadada

-Lo siento es que me emociono mucho con el ritual de iniciación de una nueva alma

-Si te das cuenta que eso suena muy sádico verdad?? - Pregunte

-Sí, pero no pienses mal es ¡HERMOSO! Ya lo veras

-Claro!-dije sarcásticamente mientras succionaba la sangre que aun salía de mi dedo

-Listo!! Ya lo tengo, este libro siempre se me pierde, debo de tener más cuidado-exclamo emocionado Marsec

Debo de ser sincera no me siento muy bien con este problema, acepto que tengo un poco de miedo, no creo en estas cosas pero tengo curiosidad de saber el porqué de mis visiones, como dicen "la curiosidad mato al gato", Espero que no lo haga con migo.

-Ya tengo todo, solo faltas tú –me dijo Marsec mientras extendía su mano para ayudarme a parar de la silla donde me encontraba

Solo sonreí nerviosamente y acepté su ayuda tomando su mano, supongo que esto es necesario para conocer más sobre mi "don".

Las luces se apagaron y se ilumino un platón en la mesa de la habitación, entre palabras que Marsec exclamaba, que casi non podía comprender, unas chispas volaban y volaban, esto es lo que el exclamo:

En el correr de los vientos,

Su esencia vuela,

La magia del reino que un día fue de ella,

Entre sabanas su secreto guarda,

Y hoy la calma regresara a su almohada,

Con esta sangre completo el rito del tuerto,

Que aclama al alma de su reina exiliada.

Al terminar todas las palabras, Marsec me miro y me dio una sonrisa de alivio; yo no sentía nada diferente, me sentía tan normal como siempre.

-Y...cómo te sientes??-exclamo Marsec

-Pues igual que siempre-dije sin interés

-Que tonto soy!!, es que no te has visto

-Verme??-dije confundida

-Pues claro si estás muy cambiada, velo con tus propios ojos.

Me gire y me mire al espejo, no puede ser posible!!!, esta no soy yo no lo soy, me veo como una diosa.

-Wow... no tengo palabras

-Lose preciosa, pues ahora si hay mucho que hacer, tienes que aprender más sobre tu pasado.

-Claro!, creo que ahora estoy más interesada-dije con mucha sinceridad

Mi apariencia era muy diferente, mi pelo mis facciones mi altura toda yo estaba cambiada, mi pelo se tornó verde como los árboles, mi piel era más blanca, y mis ojos parecían ser un pedazo de sol, no era yo.

-Niña es hora

-Hora de que??-pregunte con un tono dulce

-De que regreses al lugar que vio nacer a tus antepasados, al lugar de donde tu esencia proviene, porque ahí hallarlas las respuestas de tu gran poder

-Y como llegare ahí??

-Eso déjamelo a mí- Marsec me respondió con una sonrisa traviesa

En ese momento Marsec puso manos a la obra, se movía tan rápido que solo podía percibir su sombra ir de esquina a esquina por toda la habitación, cantaba y silbaba mientras se movía con gran agilidad por los muebles y los estantes, y de pronto freno como si fuera a tomar aire para seguir, me miro y con su mirada me dijo todo, estaba liso para partir.

Como niño en una dulcería, volver a ese lugar era su sueño dorado su gran meta en la vida y gracias a mi aparición, ese sueño seria por fin una realidad que él podría conseguir sin ningún contratiempo o eso el creía hasta que el portal se abrió, y él pudo ver la oscuridad que acechaba en el bosque, como los arboles lloraban y las aves entonaban melodías que desgarraban el corazón y el alma, como la tristeza había consumido el lugar y las almas que llenas de mal estaban, gozaban un paraíso perfecto para sus ideales.

Por obvias razones, me encontraba atónita y conmocionada por la apariencia del lugar, pues tras la narración de Marsec, mi visión del lugar era totalmente diferente a como mis ojos la percibían, pero no era todo malo pues se podía ver que la maldad aun no conquistaba todo el lugar y que aún quedaba rastro de pureza en el aire, así que nos dirigimos a ese punto iluminado para buscar un refugio y a personas sobrevivientes, buscábamos respuestas.

El caminar fue eterno, no conseguía comprender el aspecto del lugar, tan tétrico, tan acorde a la descripción de una escena de terror, se podría decir que era la personificación de la descripción de la parte "prohibida" del bosque roset, después de caminar y caminar, entre arbustos y hojas secas, llegamos a ver a lo lejos una casita ya vieja pero con las luces encendidas, corrimos de emoción, sacamos las ultimas gotas de energía y corrimos y corrimos hasta la casita, pero ella de alejaba más y más, nos asia creer que nunca la alcanzaríamos, hasta que Marsec grito.

-Tiene un hechizo!!!

-Y que podemos hacer Marsec?-pregunte ya cansada y con la voz quebradiza

-Creo que por aquí traigo como revertirlo

Marsec abrió su bolsa, saco y saco objetos muy extraños, parecía que cavaba dentro de su maleta, y de pronto lo vi, era mi DIARIOOO!! El diario azul, el que me habían dado a los 7 años, pero el cómo lo encontró, como es que lo tiene, no entiendo.

-Tranquila niña no te asustes que este no es tu diario, cada persona con el "don" llega a tener uno de estos, así que no te preocupes no es el tuyo, el tuyo no está en blanco?

-Ammm, si el mío está en blanco- dije un poco avergonzada

-No importa poco a poco escribirás tus secretos y hechizos

En este momento me siento otra vez en la escuela cuando no llevaba la tarea y la maestra se reía en mi cara como diciendo "te voy a reprobar", pero se me paso rápido ya que Marsec por fin pudo romper el hechizo de la casa, y logramos llegar a ella, al llegar subimos los escalones, que crujían y crujían, tocamos a la puerta pero nadie contesto solo escuchábamos pasos muy veloces y sombras que corrían por toda la casa, la puerta no tenía llave así que la abrimos, y tras su gran sonido, solo recuerdo ver una luz cegadora.