El destino y YO.

Capítulo 2. La historia comienza.

Tendremos el destino que nos hayamos merecido.

Vampell:

-Sí, ¿Por qué? Pregunte, ¿Acaso sabía quién era yo?

-Lo que pasa es que mi mamá siempre habla de una chica de servicio llamada Vampell y al parecer tú eres la chica de servicio. Qué raro que mi jefa platicara de mí con su familia.

-Bueno, yo soy aquella chica de servicio. Que tonta me escuche.

-De acuerdo. Y su respuesta decía que era verdad.

Dejamos de hablar, tenía trabajo que hacer, mi jefa regreso de su junta y el señor que recogía los inmuebles descompuestos o inservibles acababa de llegar.

-Ya vengo por los inmuebles dados de baja. Dijo el señor, me levante de mi asiento y me acerque hasta él.

-Entonces, empecemos. Le dicte cada uno de los números de inventario al señor, y cosa por cosa la posaba en su carro para llevarse los artefactos.

Antes de terminar de dictar todos los números de inventario, nos dimos cuenta de que faltaban algunos artefactos, así que empecé a checar con cuidado el oficio mandado para realizar dicha operación de baja.

Y mientras tanto el apuesto hijo de mi jefa solo me observaba, observaba como de un momento a otro me empezaba a estresar al no poder encontrar los artículos que nos faltaban.

Y al darnos cuenta los números estaban duplicados, uff que alivio.

El hijo de mi jefa solo se reía, hasta que llego un punto en el que empezó una especie de confianza entre ambos. Al grado de empezar a molestarnos mutuamente.

-Cuando se me termine la batería del celular, ya te podré poner atención. Esto definitivamente era más que guerra.

-Jajajajaj… de acuerdo, pero te voy a golpear ¿He?; y ahora ya salía a flote mi rudeza, eso es mala idea.

-¿Apoco tan ruda? Al parecer esa era su forma de tratar a las personas, que rara forma.

-Sí, ¿Porque la pregunta? ¡BAM! Le di en el orgullo, bueno eso pensé.

-No por nada, huuuu…. Tranquila.

-Y ¿Qué estudias? Me pregunto ahora con tono menos retador.

-Estoy terminando la carrera en administración de empresas. Uff cada vez más meto la pata.

-¿Y tú? Ahora le pregunte yo a él.

-Bueno yo estoy estudiando para ser terapeuta físico. Huuu interesante el muchacho.

-Wou, ¿Apoco? y ¿En donde estudias? Realmente era interesante este tipo, pero una cosa faltaba no sabia su nombre.

-Oye, ¿Pero cual es tu nombre? le pregunte antes de que me contestara la pregunta anterior.

-Así ¿Verdad? yo soy Rodrigo. Su nombre para variar le quedaba muy bien.

-Ah, mucho gusto yo soy Vampell. Le dije y aunque el sabia como me llamaba quise decirle mi nombre.