Después de una hora y medía bailando y bebiendo mis pies estaban a punto de reventar, pero no me importaba, nunca imagine que un hombre como Michael bailara tan bien...
-Michael, basta mañana no podre caminar -
- Eso no pasara precisamente por bailar G-
-No?- mis mejillas se calentaba poco a poco y sentía como mi sexo se lubricaba.
-Eres tan inocentona?- Preguntó con una sonrisa pícara en su perfecto rostro.
-¡CLARO QUE NO!- gritó stella mientras se acercaba a nosotros con un hombre de unos 30 años bastante atractivo tomado de su mano.
-G, es solo apariencia, en realidad es una loba en la cama-
-Stella estas borracha-
-Obvio wey-
Michel comenzó a reír al escuchar esa palabra tan mexicana salir de la boca de mi amiga.
-Bien, bien... quien es el?-
-Oh, te presento a Owen, es cubano-
-Mucho gusto owen, sabías que stell esta comprometida? -
El hombre inmediatamente se congeló, solto la mano de mi amiga y se dio media vuelta.
-¡ESTAS LOCA!-
-y tu tienes novio, asi que deja de estar de zorra-
-Estás comprometida? - pregunto Michael.
-¡NO!-
-¡SI!- Respondimos al unísono.
-Ya...ya... las llevaré a casa-
-No, vayan ustedes, yo me quedaré a bailar otro rato, este lugar esta ¡chingon!-
-Segura Stell?-
-Que si... puedo tomar un taxi mamá- Hizo lo mismo que el hombre que la acompañaba unos minutos antes y se marchó.
-Esta noche... eres mia princesa- Michael me dio un beso en el cuello y me condujo entre la multitud hasta la salida, como el lo había dicho... esta noche seré suya.
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Una noche
Romance-Te puedes marchar Giuilia, la semana que viene nos vemos- -Hasta luego - Tengo historias y cicatrices de las que nunca hablare. -No puedo mas - -Me darás mas zorra -
