Wicca: Sin of Witch

Principio del fin

La vi acomodarse uno de los castaños cabellos tras la oreja. Su mirada un poco perdida y desconcertada mientras observaba el pasto verde.

—¿Qué más sucedió?—pregunte al ver que probablemente no quisiera continuar el relato

—en mi sueño, hacíamos el amor

—¿Quién era él?

—nolo comprendo, Alera—suspiro—solo lo he visto una vez y tengo este tipo desueños con él. Es como si...

—¿fuerat u hombre?

Tailey abrió los ojos desmesuradamente, jadeo en sorpresa antes de echarse a reír.

—¡Estásloca!—rio—es un humano cualquiera. Alera—continuo—nada pasara

Yo también desee creer en eso.

—¿se lo has dicho?—pregunto Bianca. Sus ojos llenos de arrugas puestos en mí

—no. Supuse que era mejor hablarlo contigo

La anciana movió una rama seca que saco chispas y avivo el fuego, la escuche suspirar con cansancio, supongo que las penas y la edad ya hacían mella en sus hombros, después de todo, ella había cargado con la responsabilidad de guiar nuestro aquelarre, hasta ahora.

—es mejor así. Ella no tiene por qué saberlo

—¿Porqué?—era mejor decirlo, advertirle que estaba en peligro—si lo hacemos, ella...

—es el destino

¡¿Destino?! ¿Era eso más importante eso que la vidade su nieta? La mire casi con odio, sintiéndome después avergonzada por mi actitud. Para mí era una persona querida pero para esa anciana, era su querida nieta, la única familia que le quedo después que Saria se quitara la vida por el humano.

¿Era yo la egoísta? No, yo solo trataba de proteger lo que amaba.

—Alera—me llamo—esto tampoco es fácil para mi

—lo sé, yo... lo siento

—si fuera tan fácil yo misma la libraría de ese destino

—¡podemos hacerlo!

Negó.

—hacer eso  sería agrandar la condena

Me dejo sola, con mis pensamientos, con mi angustia. Con ese deseo de correr haciaTailey y advertirla del peligro, pero no podía, por más que amara a mi querida hermana, interferir seria aun peor.

 Rosette tendría que cargar con su pecado.

—¿Es así?—susurre hacia el cielo estrellado—¿me has dejado verlo para que me prepare?¿para qué no lo detenga?—un suspiro quedo salió de mi cuerpo perdiéndose en la brisa—no comprendo tu forma de amarnos

Algunas veces suelo preguntarme la razón del porqué de entre todas las personas fuimos nosotros los escogidos, la razón por la cual fuimos elegidos para cargar con dones incomprendidos por todos incluso nosotros mismos. La leyenda que cuenta nuestro origen es un poco fantástica, pero incluso nuestra existencia lo es.

La leyenda de mi pueblo dice que hace mucho tiempo Selene bajo a la tierra y engendro una hija, Aradia, esa de quien venimos. También se cuenta que Aradia fue quien tomo un puñado de personas a quienes les enseño los dones de la magia, los amo y protegió, les enseño a usar la naturaleza a favor pero cuando se vieron libres para usar aquellos regalos fue cuando las desgracias comenzaron.

Comenzaron a matarse entre sí para obtener lo que el otro poseía, robaron y atacaron a los inocentes, a los que no podían defenderse. Fue entonces que llena de dolor, al ser consciente de lo que el viento susurraba a sus oídos tomo el poder y lo guardo en la joya que sus lágrimas crearon, de esa forma nadie más podría hurtar lo que no se le concedió. Busco entre los sobrevivientes y aquellos que corrompieron el alma pero no cometieron delitos, los disperso alrededor delmundo quedando solo una familia que protegió su alma.