CAPITULO SEIS

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Estaba desesperado, hambriento, sudado y confundido, caminaba entre todas las personas como si fuera un fantasma, un muerto entre todas esas personas felices. Todo lo que me dijo Sheyla podría ser verdad, pero no podía creerle a quien me había roto en miles de pedazos, pero su mirada, su voz, su sonrisa, todo eso era una ilusión para volverme a destrozar, ella sigue teniendo mi felicidad en sus manos, ella podría hacer mi  suicidio, podría hacer lo que quisiera conmigo, deje pensar en ese mal momento, y seguí caminando, buscaba una parada de auto bus para irme; a la playa, no se aún lugar lejos, donde nadie me conociera para estar un rato a solas. Crucé una calle y había mucha gente en la parada de bus, esperando treinta minutos al fin había llego el bus, había mucho frío, todo mundo cargaba un suéter o chaqueta, yo cargaba una playera de AC/DC, estaba congelándome. La gente subía al autobús, subí al bus y pague «Un dólar con treinta centavos» Dijo el chofer del bus, pague y pasaba por los asientos, vi un lugar desocupado, pero a la par había una chica con un sudadero negro y con el capuchón negro, tenía la mirada hacia abajo, parece que no quería que nadie le viera el rostro, Me acerqué al asiento.

-¿Está desocupado este asiento? -Dije tratando de ver a la chica a los ojos

- si.. Claro siéntate -Dijo la chica misteriosamente, aún seguía sin subir el rostro

La chica se corrió un asiento para dejarme sentarme al lado suyo, ella veía a la ventana, no despegaba su mirada de la ventana, yo tenía la mirada recta. Me puse los audífonos y despeje mi mente, si miraba a alguien conocido seguramente lo ignoraría... Bueno dependiendo quien sea; la chica tratando de quitarse un audífono se le movió el capuchón y pude verla de reojo, era Chelsea, vi sus ojos rápidamente y logre ver sus ojos algo llorosos, tenía el maquillaje regado por las mejillas, ella al notar que la reconocí se volteó rápidamente.

-No le digas a nadie que estoy tratando de huir. -Dijo Chelsea limpiándose las lágrimas

-¿Porque huyes Chelsea? -Dije con un tono cálido, pero estaba algo preocupado por ella

-Solo quiero despejarme un poco, alejarme de todo ¿entiendes? - Chelsea se secaba las lágrimas

-Claro que te entiendo , por algo me subí al bus y decidí no ir a la escuela ¿te parece si te invito a un helado? -Trate de cambiarle el tema, invitarla a un helado no estaría mal, parece que Chelsea no es la chica hija mimada que creí, tiene problemas como todo mundo.

-Si, quiero despejarme un poco... - Chelsea me vio a los ojos y sonrío, al ver su sonrisa algo pasaba en mi, estaba sonriéndole, creo que en lo va del año no había sonreído tan sincera mente.

-Cuando nos bajemos te aviso Chelsea.-Chelsea se puso los auriculares y recostó su cabeza sobre la ventana, y yo me quede pensando que es lo que le pasa a Chelsea; esta chica se miraba tan... Feliz, tiene esa sonrisa de un ángel, es toda una niña inocente, pero hoy me di cuenta que tiene algo oscuro como todos, despeje mi mente y cerré mis ojos, oía gritos sentía golpes, había mucha sangre, botellas de cerveza por todas partes... ¿Porque rayos sueño esto? Creo que algo malo me espera, odio vivir esta pesadilla, incluso sueño cosas que probablemente me pasaran, esto es una mierda. El bus se estacionó y abrí lo ojos, Chelsea estaba aún lado mío escribiéndole un mensaje de texto a alguien, voltee a verla y dije

-Niña, es hora de irnos. - Me pare y le di la mano para que se levantara, ella la tomo y salimos del auto bus.

-Dominik... ¿Porque decidiste que viniera contigo? -Ella soltó mi mano

Amor Perdido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora