Capítulo 5

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No sabía el porque pero realmente esta muy nervioso y es que vamos ¡Solo saldría con mi novia! ¿Porque debía de estarlo? Sierto... Quizá por el hecho de que tiene más de 3 meses que no salimos juntos a ningún lugar, menos en una... "Cita", desde que empezamos a ser novios casi no salíamos, por lo regular yo la visitaba en su casa y ella en la mía, pero de ahí no pasábamos a más. Mi único alivio era saber que ya tenía todo planeado, mi papá llegaría hasta después de las nueve y mi hermano se quedaría en casa de un amigo, además no me preocupaba por mí aspecto ya estaba listo y con el rostro que me cargo ¡Pues menos!, aunque admito que casi me rocío todo la loción en sima.

Aún faltaba media hora para ir a buscarla a su casa, así que decidí escuchar un poco de musica, Elvis "El rey" sonaba por toda la casa sin preocupación alguna, cuando escuche que alguien llamaba a la puerta.

Gire la pequeña perilla de la entrada y con ello abrí la puerta para ver quien era, no quería ser mala onda pero cuando observe a la joven que estaba tras ella, la sonrisa que tenía hasta hace unos momentos desapareció por completo.

-¿Paul? ¿Que? ¿Que te sucede?- preguntó la bella joven un tanto extrañada, sus ojos parecía muy cristalinos y su nariz estaba roja, quizás tenga gripe y por eso se ve algo mal.

-Ammm... No... Nada- dije tratando de parecer normal- ¿Que te trae por aquí Emma?-

-Bueno... Tiene un par de días que no hablamos y pues... Es raro ¿Sabes? Además yo...- miró al piso mientras continuaba- yo... Necesitó hablar con tigo- dijo en un tono tan suave e inaudible, que parecía hablar con sigo misma.

-Ohoo... Bonita, me encantaría hablar con tigo- no sabes cuanto lo ansió- pero voy de salida y no creó poder- dije apenado- lo siento...

-Pero... ¿Como? ¿A donde vas?- mi miró de firma dolida y arrugando suavemente su frente-

-Pues...-pase mi brazo detrás de mi cabeza y comense a rascarme la nuca, no encontraba como decírselo, se que es algo normal, pero, siento que al decirle que saldré con Miriam pensara que la estoy dejando a un lado, Emma es muy dolida, sensible y sobre todo muy orgullosa, no creó que se tome bien el que le diga que pienso salir y no la escuchare como se supone que un amigo debería hacer, sin embargo, no puedo permitir que le de más preferencia a Emma, que a Miriam que es mi novia, ¡No! ¡Ya no!, si quiero cambiar lo tengo que lograr realmente y aunque me duela dejarla de esta forma lo mejor es siempre ir de frente con la verdad- lo que sucede es que hoy, por la mañana invite a salir a Miriam, ella aceptó gustosa y... Bueno... Ya debería irme-

-Ahaa... Entiendo y ¿Sabes? No hay problema, el que prefieras una tipa cualquiera, que a tu amiga que siempre a estado con tigo, ¡Me tiene sin cuidado!- su rostro tomó un color rojo intenso y sus ojos que en un principio se  encontraban llorosos ahora parecía que se saldrían de sus orbitas. Ya me espera una respuesta hací, pero también se excedió en ese momento.

-¡Emma! ¡Oye tranquila! No tienes por que ofender a Miriam de esa forma, la conoces y sabes que ella no es hací, así que te pido demuestres un poco de respeto por ella, además ¡No entiendo por que te enojas de esa forma! - no negare que me encontraba enojado con Emma, se que se molesto pero tampoco es para que empieza a ofender a Miriam, que no le hecho nada.

-¡Es que!... ¡Por favor! ¡No puedes dejarme así!, hoy... No fue un buen día- después de los gritos que pegó al cielo, empezó a bajar la tonalidad de sus palabras, que se escuchaban algo tristes y dolidas- Yo sólo... Yo sólo... Sólo quería hablar con tigo, estar juntos y divertirnos...- en eso, con esas últimas palabras, una pequeña lágrima, opaco su rostro y ahora entendía el porque se veía de esa forma cuando vino-

-Emma... Emma... Linda por favor no llores- me acerque a ella para abrazarla y hacerla sentir que no estaba sóla como ella pensaba y justo cuando la iba a envolver en mis brazos, ella los retiró con sus manos, aún con más lágrimas que iban dejando su propia huella por sus mejillas.

-¡No Paul! ¡No me toques! ¡Ya te lo dije, yo entiendo perfectamente que ahora empieces a preferir a Miriam, antes que ami, que te necesitó! ¡Total ella es tu novia, y yo sólo soy otra de tus amigas! - dijo en un arrebató y sin dejar de gritar, se que a ella le dolía mucho esto, pero no sabía cuanto me habían dolido sus palabras. De un momento a otro tomó las mangas de su sudadera y trato de limpiarse las lágrimas que anhelaban ser liberadas-

-Emma no digas eso, bien sabes que te quiero, mucho, no sabes cuanto- esto último salió sin previo aviso y en un corto susurro que era verdad-

-¡Si, claro! ¡Lo que digas! - Emma no dudó ni un segundo más y empezó a alejarse de mi casa aún llorando de rabia y dolor.

-¡Emma! ¡Emma! ¡Por favor no te vallas, ven! ¡Vamos a hablar!- grite mientras trataba de alcanzarla, ya que la linda joven que esta al frente mío y de espaldas salió corriendo y tratando de huir de mi- ¡Emma! ¡No me hagas esto!-

No pude retenerla, y ahora el que lloraba era yo, por que se que esta no es una simple pelea de amigos ¡No! Esto significa mucho más que eso, es algo peor. Algo que no se compondrá con una simple disculpa, algo que me duele más que ninguna otra cosa.

Nunca Deje De AmarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora