Anon-a-miss

Capítulo 10: Blanco y Negro

Sunset ni siquiera se molestó en cerrar la puerta después de volver a su apartamento. Era una batería descargada sin más energía de sobra. Cualquiera que sea el dolor que había sentido antes había sido ampliado ahora que su cuerpo ya no estaba en modo de supervivencia. Ella se desplomó a través de la sala de estar, más allá de la cocina y en el baño. Ella estaba en necesidad desesperada de una ducha, podía olerlo.

Cuando empezó a desnudarse, ella vio su reflejo en el espejo del baño. Parecía como si ella se hubiera arrastrado lejos de un accidente de avión. Los rasguños y moretones estropearon su cuerpo de arriba a abajo. La mayoría de los cortes en su cuerpo habían formado costras, aunque se dio cuenta de que algunas de sus heridas empezaban a abrirse de nuevo en respuesta a sus movimientos.

Su rostro se había tomado la mayor parte, con mucho, la pena. Un trozo de una servilleta había encajado en la nariz de donde ella había sido golpeada por uno de los otros estudiantes. Su labio todavía estaba roto un poco, y ella podía decir por la hinchazón que tendría que llevar una bolsa de hielo para su ojo lesionado. También digno de mención fueron los mensajes profanos y dibujos obscenos que habían sido garabateados en su cara en pluma.

***

La ducha había hecho absolutamente nada para aliviar el dolor, pero sí concederle un respiro temporal a sus problemas. Después de lanzar un nuevo cambio de ropa, Sunset comenzó la planificación de su próximo movimiento.

Snips le dijo que Rainbow Dash le había dicho a todo el mundo en que apartamento se encuentra. Si eso fuera cierto, entonces su actual lugar de residencia ya no era seguro. Gilda probablemente había informado a los otros estudiantes acerca de cómo había escapado, lo que significaba que probablemente tendría una multitud esperando a que ella fuera a la mañana siguiente.

Sunset, agradecido de que Snails había tenido la amabilidad de dejar pedir prestado el teléfono antes de irse con Snips, sacó el dispositivo móvil y marcó el número de teléfono de la subdirectora Luna. Para su sorpresa, ella todavía estaba despierta, algo que atribuyó a Luna ya que es la princesa de la noche en Equestria.

Sunset dijo acerca de su actual situación a la segunda al mando de CHS. La subdirectora, al escuchar acerca de la emboscada y los estudiantes involucrados, estaba indignada por la noticia. Informó a Sunset que ella llegaría a recogerla dentro de una hora y que ella se quedaría en su casa para pasar la noche. Con ese problema a un lado, Sunset se volvió hacia su siguiente orden del día.

Ella abrió la única cómoda y hurgó en el interior hasta que encontró su diario. Necesitaba hablar con Twilight. Había algunas cosas que necesitaba hablar con la princesa.

Sunset agarró una pluma y se dejó caer en el sofá de su sala de estar. Después de un tirón a través de las páginas de uso más recientemente en su diario, ella vio que tenía algunos mensajes perdidos de Twilight.

"Hola."

"Hola Sunset. Es Twilight, pero tú ya sabes. Así que, ¿cómo va todo hoy? "

"Hey, yo otra vez."

"¿Estás ahí?"

"¿Sunset?"

"Hey, Sunset. Es Twilight de nuevo. Sólo para comprobar cómo iban las cosas con las sirenas. Se está haciendo tarde y todavía no he oído nada ti todavía. Realmente espero que estés bien".

"Son casi las once y yo estoy un poco preocupado ahora. Por favor, escríbeme pronto".

Después de que Sunset leyó los dos últimos mensajes de que había sido un muy largo período de tiempo desde que ella le escribió por última vez a Twilight. La última vez que los dos se habían comunicado fue ayer, cuando le habló de su plan para rastrear a Adagio.