—Me alegro, porque serás el tutor de la señorita Crahan —sonrió con malicia.
—¿Qué? —Preguntó impresionado.
—Como lo escuchó, usted la ayudará —me señaló el maestro.
—Pero hay más listos que yo —Dijo desesperado.
—Vamos señor Wells —le suplicó— Si lo hace le daré créditos extras —Elevo sus cejas, Conor me miró serio, solo le sonreí— De acuerdo —dijo de mala gana.
—Gracias Conor—el profesor lo abraza— Pueden irse —nos indico, a lo cual él y yo salimos. Conor caminaba rápido, estaba furioso lo sabía.
—Conor —comencé a caminar junto a el.
—¿Qué? —dijo seco y sin mirarme.
—Gracias, por aceptar ser mi tutor —estaba apunto de abrazarlo, pero él me alejo con su brazo.
—No lo hice por ti, lo hice porque necesito esos créditos extra —rodeo los ojos y siguió caminando.
—¿A donde vas? —pregunté caminando junto a él.
—No te importa —espetó.
—¿Puedo ir? —sacudí su brazo.
—No —sentenció.
—¿Por qué? —hice puchero.
—¡Porque no quiero que vayas! —me gritó.
—¿Y por qué no quieres que vaya? —le sonreí.
—¡PORQUE NO ME CAES BIEN! —gritó y se fue caminando furioso, admito que me asusté un poco cuando me gritó, ese chico estaba demasiado amargado; me quede ahí parada, sin saber que hacer, ¿lo sigo o me quedo aquí?.
—Creo que alguien perderá la apuesta —dijeron en tono burlón detrás de mi, me voltee y ahí estaba Harry con una gran sonrisa, sin darme cuenta sonreí también; amaba a Harry era mi mejor amigo, no se que haría sin él.
—Ganaré, tenlo por seguro —le sonreí.
—No creo que sea así, o al menos por lo que acabo de escuchar —rió, oh no, había escuchado cuando Conor me gritó, mierda.
—Es parte de mi plan —de hecho no tenia ningún plan— Primero me odia, después me ama —sonreí victoriosa.
—Si claro —rodeó los ojos y me abrazó— ¿Me acompañas amor? —dijo y yo reí.
—¿A donde? —pregunté.
—A que conozcas a un amigo y de paso vamos por Hanna Banana —reí ante lo que dijo.
—¿Hanna Banana? —lo mire riendo.
—Si, es mi nuevo apodo para ella —sonrió triunfante.
—Por favor prométeme, que jamás me pondrás un apodo —supliqué.
—No prometo nada —rió.
Comenzamos a caminar abrazados, varios chicos me chiflaba o me gritaban cosas y Harry solo los miraba con desprecio, o les decía "Ella es Mía" y me abrazaba mas fuerte, yo solo reía, él siempre era así conmigo, me trababa como su novia, pero ambos sabíamos que solo eramos amigos.
Llegamos al cuarto de Hanna y tocamos la puerta. Nos abrió una chica muy hermosa ya la había visto pero... ¿donde?—¿Puedo ayudarlos? —dijo la chica amablemente.
—Si, ¿está Hanna? —preguntó Harry sin dejar de abrazarme.
ESTÁS LEYENDO
Los Secretos de mi princesa
Roman d'amour"Todos tenemos un pasado y aunque no queramos mencionarlo, nos perseguirá, día a día. Atormentándonos con esos recuerdos" -Conor. . . Un agradecimiento muy especial a @Twfashe por la hermosa portada de la historia♥