|Capítulo|2|

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Hacía un poco de viento, pero nada extremista, los rayos del Sol también estaban presentes, sin embargo no se sienten quemar tu piel y hacer suda tu cuerpo de manera excesiva, solo están ahí, siendo cálidos.

La casa de Lucía no se encuentra muy lejos de la suya, eso hasta apenas hace un año. El sótano de su antigua casa se llenó de abejorros, un gran panel se encontraba en una esquina de la pequeña habitación, claro que no lo notaron desde un inicio y eso dio oportunidad a los abejorros de hacer más grande su familia, para cuando se dieron cuenta, la mitad de la casa la cubrían puros abejorros, y a pesar de que llamaron a los exterminadores y terminaron con ellos, Molly, la mamá de Lucía, no quedó conforme, oía el molesto zumbido de los abejorros por todos lados, su esposo lo mejor que pudo hacer fue conseguir aquella casa a dos cuadras de la suya, el par de ancianos que la vendía habían decidido irse a una bonita casa de reposo y pasar ahí su vejez juntos, no tenían familiares cerca y no queriendo dejar su casa arrumbada simplemente, le dieron un precio bastante accesible a los padres de Lucía y ellos aprovecharon la oportunidad. Ahora en lugar de ver a la señora Jhonson regar sus plantas, veía a Tyger, el perro de Lucía, jugando y sacando tierra. Era un lindo perrito.

Katherine toca el timbre y a los pocos segundos, una sonriente Molly la recibe, le deja pasar y le indica que Lucía sigue en su habitación, así que Katherine se dirige ahí.

La música suena a todo volumen, y apenas va a la mitad de las escaleras. Con la confianza que han ganado en tantos años, a Katherine ya no le da pena alguna entrar como si nada a la habitación de su amiga. Ahí esta ella, con su cepillo en mano frente al espejo, fingiendo que la gran voz que se escucha por todos lados es de ella, cuando en realidad es de Katty Perri, ya quisiera Lucía tener una voz así, pero estaba lejos de estarlo, el coro de la iglesia pensó lo mismo, pues a los ocho años que ingresó tres meses después la sacaron, no buscaban cantantes profesionales, pero tampoco chicas que parecieran cotorros, y bueno, a Lucía se le rompió el corazón, pero lo superó rápido, afortunadamente dejó esas ideas del canto y se conformaba con imaginárselo en su cabeza.

-¡LUCÍAAAAAAAAA!

Grita a todo pulmón y lo siguiente es Lucía gritando como loca, da la vuelta, se tropieza con sus propios pies y cae al suelo, Katherine suelta una carcajada y se dirige a bajarle a la música.

-¡Maldita sea Katherine! -grita molesta mientras se levanta del suelo.

-Oh vamos, debiste haber visto tu cara, todo un poema -ríe- Además, no es mi culpa que tengas la música en tan alto volumen, yo solo quería que supieras que ya llegué -se encoje de hombros inocente.

-Ugh, hay maneras -dijo poniendo los ojos en blanco, se voltea de nuevo al espejo y suspira- Como sea, estoy lista, podemos irnos.

-Bien -asiente con una sonrisa burlona.

Mientras salen de la habitación y bajan las escaleras, un mensaje llega al celular de Katherine.

De: Alex.

"Estamos aquí, solo faltan ustedes."

Se despiden de Molly y salen de la casa, caminan con el paso apurado hasta el parque más cercano. No tiene mucho tiempo que abrieron la renta de bicicletas, podías andar con ellas por todo el parque, e incluso moverse con ellas hacia otra estación o parque dónde se tenga la misma actividad, todo estaba en conjunto. Katherine y sus amigos por el momento no estaban interesados en salir más allá del parque, ella ni siquiera sabía porqué de repente les salió el gusto por el ciclismo, pero podía ser divertido.

Pudo ver a sus amigos en la caseta, cada uno con una bicicleta a su lado, y un casco colgando del manubrio, por protección. Katherine saluda a cada uno, hasta llegar a Alex, él se acerca y le deja un beso en su mejilla, el resto comienza con sus burlas tontas, siempre creyendo que Alex se le insinúa, pero la verdad es que Katherine no lo piensa ni ve así, ella esta segura que Alex solo quiere su amistad.

-La cita era para hoy chicas, no dentro de un año -dijo Bryan.

-No molestes, estamos aquí ya -Lucía pone los ojos en blanco.

-No nos culpen de todo, por lo que veo, Vanessa aún no llega -Katherine frunce el ceño, buscando a la chica.

-Ya viene, sólo fue por una botella de agua.

Y efectivamente, un par de minutos después, Vanessa llega con una sonrisa y una botella de agua, saluda a las recién llegadas. Katherine fue para escoger una bicicleta, cuando su vista se para en una doble, ella no creía que alguna vez en su vida viera una así, es decir, pensaba que sólo estaban en las películas, pero ahora una esta frente a sus ojos y la tentación de subirse en ella es grande.

-¡Lucía, mira! -señala la bicicleta con emoción- Debemos subirnos a esa.

-Paso, prefiero una individual -niega con la cabeza.

-Eres una mala amiga -frunce el ceño a lo que Lucía solo se encoje de hombros.

-Puedo dejar esta y subirme contigo, si quieres -ofrece Alex con una sonrisa.

-Katherine asiente- Si, esta bien

-Los novios juntos, me gusta la idea -dice Bryan burlón, Lucía y Vanessa ríen, Alex lo ignora y Katherine solo rueda los ojos con diversión.

Cada uno se montó en su respectivo lugar, mientras que el resto ya había avanzado. Alex en la parte delantera y Katherine en la parte de atrás, le resulta muy divertido, y algo extraño estar montada en una bicicleta así. Alex voleta un poco y le sonríe, ella devuelve el gesto y el regresa la vista al frente.

A Katherine no le molestan los comentarios de sus amigos, ella quiere mucho a Alex, él la conoció poco tiempo después de que sus "amigos" se fueran camino a la fama. Alex le ayudó a distraerse del tema y tiempo después a darlo por olvidado, o al menos pretender hacerlo, y hasta ahora le ha funcionado bastante bien.

Katherine se desconectó tanto, que no supo en que momento se dividieron, el resto de sus amigos no se encontraban al frente suyo. Sin embargo no toma mucha importancia de eso y sigue, Alex va al frente así que él sabe lo que hace.

El chico se detiene justo frente a un gran árbol, una jacarandá y Katherine lo observa maravillada, a ella le encantan. Ambos bajan de la bicicleta y Alex la recarga contra un pequeño arbusto.

-¿Y el resto de los chicos? ¿Por qué paramos?

Alex suspira, separa su vista de la bicicleta y la mira a los ojos -Se desviaron un poco, la verdad es que les pedí que lo hicieran.

Katherine frunció su ceño, y algo comenzaba a agitarse dentro de ella.

'No, por favor.'

-¿Y eso se debe a...?

-Bueno, uhm, yo como que quería, en realidad no es..... bueno yo te iba a decir -suspira- Te quiero mucho, lo sabes tú y todos, te quiero demasiado, incluso un poco más de lo que debería, y yo...

'Oh no.'

-Alex, respira -ríe un poco para aligerar el ambiente- Lo que tengas que decir sólo dilo y ya, sin rodeos.

El chico asiente, se toma un respiro cerrando los ojos, expulsa el aire, abre los ojos para ver directamente a los de ella- ¿Quieres ser mi novia?





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Están cortos, ia c.

¿Alguna dedicación?

Y saben, sus comentarios, su amor, sus opiniones, todo.

Las amo, besos en la cola. xx



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⏰ Última actualización: Jan 25, 2016 ⏰

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