¿De qué te escondes?

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Tenía los ojos rojos, hinchados y húmedos, me sentía patética, el mismo escenario de hace meses, en mi cama, con la puerta del cuarto cerrada, el éstereo encendido, llorando y escribiendo sobre mi dolor, sacándolo todo de la única forma en que sé hacerlo, con letras.

Al terminar de escribir todo lo que en el día había estado golpeteando dentro de mi cabeza, tratando de salir, casi traspasando mi cráneo y mi piel, y que sin embargo no puedo decirle a nadie, cuando por fin termine de redactar lo que por tanto tiempo me ha estado atormentando, y con los ojos llenos de lágrimas, cerré el cuaderno.

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6:00 a.m.

*Alejate de mi, quema mis cartas, olvidalo todo, no quiero que sigas cargando con mi vida de mierda*

*TunTun TunTun*

Oh callate. Apago la alarma de mi celular y a duras penas me levanto para ponerme el uniforme de mi nuevo colegio ¿Por qué me hacen usar uniforme en preparatoria? Odio las faldas, odio las calcetas y odio las camisas polo.

Hoy es un día tan cliché, hasta yo me doy asco, me siento en una estúpida película de drama adolescente, el primer día de clases de preparatoria, bueno, el primer día para mi ya que todos los demás empezaron el curso hace dos semanas, yo entre después por razones... que sólo el cuaderno sabe y que no contaré a nadie más, debo decir que el entrar con retraso no esta tan mal después de todo, con suerte ya todos habrán formado sus grupos y yo podré estar sola con mis pensamientos, mi música, mi libro nuevo y me volveré invisible, es lo único que deseo en este momento.

- ¿Lucy? ¿Acaso me subí al auto sola?- mamá interrumpe.

- Pues yo no te ayude, madre.

- ¡Palabras! Gracias al cielo hija, pensé que te habíamos perdido.- odio cuando mi mamá utiliza sarcasmo.

- ¿Puedes reconsiderar lo de la escuela por internet?

- Hija ya lo hablamos, estar sola todo el día, no te hace bien, necesitas salir, conocer gente nueva, broncearte un poco, estas pálida como un hueso, ya verás que te hará bien.- el mismo discurso siempre.

- Por eso mismo pensé que si me habías escuchado cuando dije que no me interesa conocer gente, ni nada de eso- no es que no me interese, realmente desearía tener amigos, pero no creó que pase, he cambiado tanto en los últimos meses, que antes de conocer gente nueva, me gustaría conocerme a mi misma.

Aunque insistí en que no lo hiciera, mi mamá me acompañó hasta la dirección para que me dieran las indicaciónes y el calendario de eventos de Lincon College, es un pequeño colegio privado que esta a unas cuadras de casa, mis papás no me quieren tan lejos, tienen miedo...

- ¿Lucía? La profesora Natalie te dio una indicación.

- ¿Ah si? Disculpe ¿Qué dijo?

- La señorita Natalie te invitó muy educadamente a pasar al aula de computación a completar tu prueba de...

- Coeficiente intelectual señora Webster, segundo piso tercer aula, puedes retirarte. - esta mujer me da mala espina.

Los pasillos estaban completamente vacíos y por un momento sentí ganas de sólo seguir vagando por ellos... Hasta que mi cara se vio estampada con una espalda.

- Lo siento, ¿estas bien?

No.

-amm si, perdón es que... No te vi.- y ahora que lo veo, un chico no debería estar parado a medio pasillo.

Letras PeligrosasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora