"Este año va a ser mejor Evelyn. Venga, vas a proponerte metas nuevas y a aprovar todas, eso sí despues del verano que ahora no me apetece."
Esos pensamientos llevan por mi cabeza mucho tiempo y poco a poco me voy olvidando de ellos. soy Evelyn allen Lewis y tengo diecisiete años. vivo en un pueblo cerca de una ciudad en California. solo vivo con mi madre y con mi gata pero eso es todo lo que necesito. ha empezado el verano después de un terrible curso con estrés post-exámenes y horribles y deliciosas tazas de café por las mañanas. espero con ansias que mi mejor amiga kira se venga a vivir por fin este año a este pueblo con su madre ya que vive lejos con su padre.
Camino a encontrarme con mis amigas en "Loin" un bar de mi pueblo. No es de estos típicos bares de viejos jugando a las cartas si no que es un bar donde conocí a mi segunda familia. La amo. Entro animádamente y me encuentro con mi grupo de amigos habitual. Reconozco a Nadia y a Tania y me acerco. Les digo hola con la cabeza y entro a visitar a mi querida familia. Me acerco a la barra lentamente y le pongo las manos en los ojos a Alex.
-¿Quién soy?-dije poniendo una voz ronca y grave. Se da la vuelta y me da un gran abrazo de oso. Huelo su pelo moreno y largo recién lavado. De repente me levanta como a una pluma y empiezo a patalear freneticamente.
-¡Suéltame hombre de las nieves!-el ríe y me suelta teniendo por fin contacto con el suelo.-Aunque tengas casi veinti pico años más que yo no tienes derecho a tratarme como a un saco de patatas- dije un poco molesta.
-Anda vé con las chicas que te estan esperando.
Me acerqué a Nadia y a Tania y les dí un intenso abrazo.
-Evelyn, como siempre tardas mucho no es justo que tengamos que aguantar al tarado de Loke por tí.-dijo Nadia molesta. Loke se giró al oir su nombre y me vió. Se dirigió corriendo hacia nosotras.
Iba a hablar pero lo interrumpi.
-Antes de que digas algo piensa detenidamente las palabras que van a salir de tu boca porque alomejor tienen consecuencias graves.-él se lo penso mejor y penso. No puede ser. Pensando Loke. Tengo que celebrar una fiesta por este logro de este extraterrestre sin cerebro.
- Hay un pájaro que no puede volar fuera y necesita que lo translademos a un lugar más extenso para que tenga espacio para que despegue, ni siquiera te iba a decir eso, idiota te iba a decir hola-
Una sonrrisa malvada salió de mi cara. Tania se dió cuenta.
-Hermanito, la acabas de cagar.
Él intento correr pero yo fuí mas rapida y cogiendole del pelo le clavé los nudillos en su cabeza con cerebro del tamaño de un gusano.
-¡Para ya no es justo, déjame en paz!
Lo dejé en paz solo porque me dolían los nudillos de tanto apretar. En cualquier momento podría haber creado fuego.
-¡Evelyn tienes los nudillos rojos!-dijo Tania cogiéndome de la mano-¿vamos a hecharles un poco de agua?
-¡Claro y a tu hermano que le den! ¿no?-yo reí no se si por la reaccion de Loke o por cómo tenía el pelo.
Me meti en el baño y me lavé las manos. Salí y entré en el bar. Pero nada mas entrar me encuentro a un chico rubio y con ojos color miel obsevándome. Sonrreia. Paralizada miré hacia otro lado. Volvi a mirar. Mierda, me equivoque. Él estaba mirando a la señora que esta detras detras de mi.
Me acerco a las chicas y a Loke que me miran extrañados pidiendo respuestas de la cara que estaba poniendo en ese momento.
-¿No veis de estas cosas enbarazosas que no puedes evitar y te estas avergonzando todo el día? pues acabo de ser una víctima de esa horrible experiencia.-se lo expliqué todo y los tres se hecharon a reír sin piedad. Molesta les pellizque a cada uno.
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Tratando con extraterrestres
Casuale¿Que narices es amar?Ni lo sabia ni me importaba. Hasta que una sensacion rara desperto en mi cuerpo al tener contacto con él, lo odio por hacerme sentir asi. Asco de vida. Ojalá pudiera meterme en la mente de los tíos. Sería un descubrimiento cient...