Sin título.

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Me desperté con todo el pelo revuelto, solo había dormido 3 putas horas y lo peor de todo es que era lunes, un dichoso lunes de esos que parece que nunca se acaban. Me puse lo mas básico del mundo, no tenia ganas de pensar en que modelito me quedaba mejor, coji unos vaqueros,unas zapatillas, camiseta de tirantes y una sudadera.Metí en la mochila lo indispensable para el día.Me arreglé un poco el pelo y me lave los dientes coji algo de almuerzo y me fui de casa, mis padres ya se habían ido a trabajar así que era como si tuviera un piso de soltera.
Salí de casa encendiéndome un cigarro, me pare en la esquina,un punto intermedio entre la casa de Alice, Zaira y la mía.La que primero llegó fue Zaira y a los 5 minutos Alice, como siempre tarde, fuimos en camino a el instituto a paso lento, las tres fumando y hablando de la noche de ayer.

-Me ha salido otro puto moratón, nos deberían pagar más por este tipo de misiones.-Dijo Alice medio gritando,creo que se entero todo el vecindario de el moratón.

-Tienes que tener en cuenta de que nos ofrecimos voluntarias, es un trabajo para espías más mayores y experimentadas.-Dijo Zaira en voz más baja, ella es mas tranquila.

-Además en medio de la misión parecías divertirte así que no creo que te moleste tanto lo del moratón.-Dije riendome un poco de ella.

La misión de ayer consistió en una fiesta en un casino de la ciudad, nosotras entrábamos en el casino y intentábamos descubrir porque el dueño del casino recibía dinero de una cuenta que no estaba relacionada con el casino, descubrimos que vendía coca cuando emborrachamos a un par de sus ayudantes, pero mientras les emborrachamos también se emborracho Alice, y se llevo unos cuantos moratones de caerse.Pero como a los ayudantes les pareció divertida siguieron bebiendo y haciéndola beber, creyendo que iban a conseguir algo después, hombres.

-Bueno aun así estoy dolorida, no se porque diablos me puse tacones.-Reprochó Alice.

-Porque teníamos que parecer de 23 años y tenemos 17 y somos bajitas.-Dijo Zaira y llevaba toda la razón del mundo.

Cuando llegamos a la escuela nos sentamos en nuestros pupitres y sacamos los cuadernos.Para estar en el programa tenias que tener un 8 de media en todas las asignaturas, Zaira y yo los teníamos pero a Alice los estudios le costaban más. Ella fue seleccionada mediante un programa de rehabilitación, ya que estuvo en un correccional cuando tenia 14 años, porque robaba móviles y luego los vendía para pagarse una moto, al ver su forma de robar gente del gobierno decidió meterla en el programa de espías para ver lo que era capaz de hacer en una organización legal. Le dijeron que tenia que subir su nota académica, así que le ayudamos.

No nos solemos relacionar mucho con el resto de la clase, ya que la mayoría son unos estúpidos o no nos interesan, estamos nosotras juntas siempre, nuestro colgante lo demuestra.Son tres chapas militares (Irónico porque a veces los entrenamientos del programa parecen entrenamientos militares) con los nombres de las tres en cada uno, sencillo pero bonito.

Cuando acabaron las clases volvimos para la esquina tomando otro cigarro, ya que en el instituto no podemos salir a fuera a fumar porque somos menores.Y en la esquina nos despedimos, sabiendo que nos íbamos a ver en unas 2 horas.
Cuando llege a casa mis padres estaban en la mesa esperándome para comer, me preguntaron que tal el día y si tenia ya preparado todo lo de esta tarde.Les conteste que si, pobrecillos, se piensan que me voy a clases de ballet todos los días de 4 a 9. Todavía no se que les diré cuando me digan que cuando van a verme actuar, solo espero que me de tiempo a inventarme una buena escusa. Cuando termine de comer encendí el ordenador y me metí en una web de e- mails solo para el programa y confirme que no había planes de última hora y teníamos que cojer un vuelo a media noche a China.Suelen notificarnos las cosas mediante un busca que llevamos pero por si acaso yo lo miré. Luego metí la ropa de entrenamiento en la mochila y salí de casa despidiendo a mis padres hasta la noche, si no surgía otro plan.

Más que una chica.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora