Forever and Always(Ricky Horror fanfiction)|TRADUCIDO AL ESPAÑOL|

CAPÍTULO 15.

Narra Ella

Escuché la puerta abrirse de golpe y a Emma gritar.

–¡YA VOLVÍ, PERRAS! –Entró y no se dio cuenta de que Ricky estaba en la esquina del sofá, solo se dejó caer en el suelo y se acostó ahí. Literalmente se tiró en el suelo. –¿Me extrañaste? –Preguntó. Su voz estaba ligeramente apagada.

–Claaaaaro, totalmente –Respondí sarcásticamente.

–¿Me puedes cargar? –Preguntó. Yo suspiré.

–No –Respondí. Ella suspiró profundamente.

–¡Eres una zorra! –Gritó. Siempre me dice que soy una zorra cuando no la cargo y no es la primera vez que me pide que la cargue.

–¿Todo porque no te quiero cargar? –Pregunté.

–Mmmmmm –Dijo. Suspiré pesadamente y la cargué. No es muy fácil cuando tratas de cargar tu propio peso. Empecé a caminar mientras ella gruñía y cubría su rostro.

Ricky aclaró su garganta y Emma rápidamente levantó su cabeza, mirando a Ricky con ojos retadores.

–No viste ni escuchaste nada –Emma dijo. Él asintió lentamente probablemente porque no estaba seguro de que decir o hacer.

–¿A dónde te llevo? –Pregunté.

–¡A mi cuarto! –Gritó. Suspiré y la lleve a su cuarto. Er más fácil cuando Devin estaba aquí. Finalmente llegamos a la puerta de cuarto la cual era la última del pasillo, abrí y la deje acostada en su cama. –¿Me puedes quitar los jeans? –Preguntó. Rodé mis ojos y refunfuñé.

–No, no te voy a quitar los jeans.

–POR FAVOOOOOR –Me gritó.

–De acuerdo, pero me debes una –Dije.

–Bien –Dijo. Levanté mi meñique e hicimos una promesa por la garrita. ¿Qué? ¡JA! No, no somos niñitas. ¿Por qué pensarían eso?

*Dos horas después*

Estaba acostada en la cama tratando de terminar el libro que estaba leyendo cuando escuché que tocaron la puerta. Estaba vestida con una camisa transparentosa y unos shorts cortos. ¿Qué? Es cómodo.

Fui a abrir la puerta y era Devin, quien estaba mirando su celular. No creo que haya escuchado cuando abrí la puerta pues ni se inmuto en verme.

–¿Sí? –Pregunté. Él se sobresaltó y me miró rápidamente, analizando como estaba vestida. Se ruborizó un poco, que cuchi.

–Eh...Yo...Esto...Deje algo en el cuarto de Emma, pero...Emmm, está cerrado. –Dijo realmente rápido. Yo asentí y vi la llave que estaba en suelo, me agaché y la recogí.

–Gracias...–Dijo. Le sonreí y cerré la puerta. Volví a acostarme y continué con mi lectura.