Cada vez se iba metiendo más en su propia oscuridad, sabiendo que si seguía así probablemente no saldría de ahí. Aunque por fuera parecía que todo estaba igual que siempre, su interior se iba oscureciendo cada día más. Dejaba de hablar con la gente, de confiar en personas a las que antes les confiaría su vida. Solo dos eran las personas que sabía que siempre estarían a su lado y nunca la fallarían. Esas dos chicas que le sacan una sonrisa en sus peores momentos y por las que daría su propia vida o mataría. Y, aunque echara de menos ser como antes, tener esa confianza infinita con sus padres, reírse por cualquier tontería que le dijeran, ser una de las personas más dulces, sabía que ya no había vuelta atrás. Aquella chica se quedó atrás hace mucho tiempo y no tenía intenciones de volver. Porque, al contrario de muchos, a ella le gustaba como era ahora. Los amigos de verdad se cuentan con una mano.
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Midnight thoughts
Não FicçãoPuede que te sientas identificado con lo que escribo, puede que no, pero me da igual. Esto no lo escribo para nadie, lo hago para mi y para poder desahogarme de alguna forma, por fin.