Capítulo 10. Sueño de un beso...

7.1K 392 69
                                    

*Nota:
Cambié el vídeo, porque lo quitaron por derechos de autor, el que puse los detalles del principio no me gustan pero es el que más se escucha como la canción original, espero y aún así lo disfruten.*

Atte: LuzMarí 😊

(POV. Naruto)
**sueño**
Estaba en el bosque, todo lo cubría la nieve, los árboles estaban secos con un poco de nieve sobre sus ramas. En el piso no se veía más que una gruesa capa de hielo, iba corriendo por un pequeño sendero, después de un rato me cansé, por lo cual me acosté sobre la nieve, de pronto se me ocurrió jugar con ella, empecé a mover mis brazos y piernas hacia arriba y abajo, cuando estuve seguro de que se formó un ángel me paré y lo observe, había quedado increíble, una sonrisa se formó en mi rostro...
Seguí jugando hasta que me canse, por lo cual opte por irme a sentar en mi columpio favorito. Estuve un buen rato... Hasta que escuché a unos niños reír seguido de un sollozo, inmediatamente corrí para ver lo que estaba ocurriendo.
Cuando llegue vi a una pequeña niña con el pelo corto llorando en el suelo, tal vez de mi edad, alrededor de ella habían unos niños más grandes burlándose de ella, le decían que sus ojos daban miedo y que era "el monstruo  del Byakugan", sinceramente no sabía ni que era eso, pero decidí ayudar a esa niña. Desgraciadamente yo tampoco pude hacer nada y solo conseguí que me pegaran, pero me alegraba el pensar que pude salvar a esa pequeña niña, después de todo sería el próximo Hokage y tenía que salvar a muchas más personas...
De pronto abrí los ojos y la niña me están mirando sosteniendo mi bufanda, algo en ella me hizo sentir feliz. Su mirada. Era la primera vez que alguien me veía sin desprecio...

De pronto desperté... ¿Por qué soñé eso? Ni siquiera fue un sueño, fue un recuerdo. Creo que realmente lo había olvidado, ahí conocí a Hinata... Tenía mucha sed, por lo cual decidí ir a la cocina por un vaso de agua, menos mal que ya sabía dónde se encontraba, sino me hubiera perdido en la enorme casa del Sr. Hiashi.
Después de tomar agua subí hacia la habitación que me habían ofrecido, subí por las escaleras y camine por el pasillo, cuando iba a abrir la puerta algo me detuvo... Voltee hacia la puerta que estaba del lado izquierdo, me inundó una sensación de verla, cuidadosamente abrí la puerta y me asomé para asegurarme de que Hinata estuviera durmiendo. Avance lentamente hacia su cama cerrando la puerta detrás de mí, cuando la vi me quedé sin palabras, estaba hermosa incluso durmiendo, traía una pijama de color azul claro, su pelo estaba un poco esparcido sobre su almohada blanca, una de sus manos estaba sobre la almohada a un costado de su rostro, su pelo estaba un poco esparcido sobre su almohada blanca, mientras que la otra mano sostenía la cobija sobre su pecho, su cara estaba un poco sonrosada y sus labios se encontraban entreabiertos. Mi cuerpo se empezó a mover solo, me acerqué a ella, sabía lo que haría... Cuando estuve cerca de su rostro su aliento chocó en mi cara, empecé a cerrar los ojos y a acercarme más...

-Naruto... - inmediatamente levanté muy cara, pero me sorprendió cuando vi que aún seguía dormida.

De cierto modo me sentí increíblemente feliz el saber que estaba soñando conmigo, así que no lo dude más y volví a poner mi rostro cerca del suyo, cerré los ojos y la besé... Ella me correspondía, era un beso tierno y lento, nunca me había sentido así, no sabía que era lo que sentía... Pero me gustaba, quería seguir sintiendo esa sensación...
Con pesadez me aleje para mirarla, pero seguía dormida, empezó a fruncir el seño, perecía que iba a despertar en cualquier momento, entonces sentí pánico, salí inmediatamente de su habitación sin hacer el más mínimo ruido. Espere un momento para escuchar cualquier ruido, escuche que se levantaba, empiezo a caminar, entonces escuché el agua caer del lavabo de su baño, luego el agua paró, empezó a caminar otra vez y escuché cuando se subió a su cama. Pensé que ya era suficiente, por lo cual me metí a mi habitación y me acosté sobre la cama, puse mis brazos atrás de mi cabeza y estuve mirando un rato hacia el techo, parecía que realmente no se dio cuenta, eso me tranquilizaba, después de todo que diría si despertara y me viera en su habitación, diría que soy un pervertido o algo por el estilo, realmente no quisiera parecerme al Sabio Pervertido.
Finalmente mis ojos se empezaron a cerrar, y no supe en que momento me quedé dormido.

Desendiente Pura...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora