Cap I Parte I de II Una vez iniciado, nunca terminará

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No recuerdo mi nombre real, el nombre que me pusieron mis padres al nacer y que recordé durante mis 16 años en los que viví en Dublín, Irlanda. Tampoco recuerdo los rostros de mis compañeros, ni de mis amigos, ni de mis familiares. Solo sé que el día que cumplí mis 17 años todo se fue, de los que quedaron recuerdos que aun trato de mantener. Les contaré mi historia con esos recuerdos vagos y fugaces, tratando de darles el mayor detalle y en los huecos o lapsus pondré pequeñas mentiras como "hacía frió" o "su rostro se veía tranquilo, sin expresión"; se les hará más cómodo, lo sé. De todas maneras, esas memorias participarán muy poco durante toda la historia.

Era una mañana tranquila, una muy especial. Era 17 de junio y el frío empezaba a molestarme mientras todavía estaba acostada entre las sabanas en mi cama. Abrí los ojos y voltee hacia la ventana, vi las gotas de lluvia pegadas a ella, vi como la vela de una lámpara roja empezaba a ahogarse en su propia cera

-Eso no estaba ahí. - Dije en voz poco audible. Me levanté, sentí mi cuerpo pesado, como si mi cuerpo quisiera abrazar el suelo, había soñado cosas extrañas, hadas que bailaban y cantaban a mi alrededor, reían alegres, como celebrando algo. En el sueño distinguía muchos símbolos que no logre recordar, de cierta forma fue todo muy agotador.

Logre llegar a la lámpara, extendí mi brazo y toque la lámpara con mi dedo índice, estaba cálida y me daba la sensación de tranquilidad. Mi madre abrió la puerta de golpe.

-Hija! Feliz cumple años, ay mi pequeña niñaa! - Me quito toda la pesadez de mi cuerpo e hizo que me despertara de un solo grito.

-Mamá! - me queje.

-de alguna forma tienes que levantarte-

- estoy levantada! -

- Vamos que tus amigos están esperándote abajo- dijo sonriendo y saliendo de mi habitación.

Camine rápidamente hacia el clóset, elegí mi ropa. Corrí hacia el baño abrí la puerta y me encerré en el, desnude mi cuerpo frente al espejo, recorrí con mis ojos mis brazos, mis piernas, mi torso, mis senos, mi piel pálida, mi cabello rizado y negro descansando en mis hombros - No puedo creer que esté cumpliendo 19 años...- hable sola, me metí a bañar.

Al salir ya aseada, baje las escaleras de la casa y caminé hacia la puerta trasera para encontrarme con tres de mis mejores amigos, que hacia ya bastante tiempo que me visitaban cada año en mi cumpleaños, para visitar el mismo bosque, solo que cada año visitábamos un parte diferente del bosque, esta vez iríamos más allá, un viaje de varios días.



sé que es corto, pero quiero picarles en la curiosidad, quiero saber si les gusta como va (independiente de eso, igual seguiré subiendo jaja)

Parte II Insólita aparición.

Murmullos inalcanzablesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora