Prólogo|Las cenizas del Héroe|Prólogo

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El presente:

???: Asique quieres que te cuente la historia del héroe una vez más eh?-

dice un amable anciano a su nieto

??: Si abuelo, es mi historia favorita y lo sabes.-

lo mira a los ojos casi rogándole con la mirada al anciano

???: Esta bien pero tendrás que conformarte solo con sus inicios por esta noche.-

le da una palmada en la cabeza al joven mientras lo aropa con la frazada confeccionada de cuero de jabalí.

??: Owwnn.. está bien pero mañana me la cuentas entera-

sonrio inocentemente intentando convencer a su abuelo.

???- está bien, comencemos-

el anciano tosió y preparo la voz para relatar.

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Hace muchos años, tal vez siglos, ocurrió un desastre en una pequeña aldea la cual era conocida como Xenthel,en esta se ocultaban seres místicos junto con humanos para pasar desapercibidos, un día llega una familia, la familia estaba conformada por una mujer de tez blanca y rubia, un hombre alto caucásico y un pequeño bebe de tez blanca con el pelo negro el cual estaba en brazos de la mujer, o eso dicen.

La familia se hospedó en una casa de dos pisos la cual estaban constituida por paredes de piedra y un techo de madera el cual parecía resistente, el interior era pobre, solo había una mesa con sillas, una zona para la fogata y dónde cocinar, además de las habitaciones que estaban en el piso superior, éstas eran dos una con un catre grande y la otra totalmente vacía donde pusieron la cesta colgante del bebé, está estaba atada al techo por medio de cuerdas y con un colchón de plumas y hojas para que el bebé no se lastime al acostarse en la cesta de madera.

Esta familia vivió tranquilamente por lo menos un mes. cuando los rumores de que esta familia había llegado al pueblo llegaron al reino de magos oscuros del bosque del sur el cual estaba consumido y podrido por la oscuridad, el líder de este grupo dio la orden de ir a la aldea por el bebé ya que este contenía un poder en su interior el cual no podía quedar en la tierra.

Desde el día de la orden un ejército de 200 magos entrenados en el antiguo arte del Pyro Magea partió en busca de la purificación del planeta asesinando al bebe, comandado a la cabeza por su líder Yendor. Este grupo tardaría meses en llegar al pueblo al paso el cual se trasladaban pero nada los detendría de lograr su objetivo.

Mientras el ejército se acerca lentamente en el pueblo empiezan a haber rumores de que se está formando un ejército para cualquier tipo de contingencia gracias al padre del bebé el cual propuso la idea de la protección del pueblo.

Dos días antes de que el ejército de magos llegará al pueblo, el ejército local ya estaba listo para poder contrarrestarlos e intentar vencerlos, sin saber que realmente tendrías que utilizar el reciente entrenamiento en un campo de batalla que probablemente sería los escombros de su amado y querido pueblo.


Una vez comenzó la batalla muchos hombres tanto magos como guerreros fallecieron, pero los magos arrasaron en cantidad y pasaron sobre las tropas como si fueran un caracol el cual está de paso en el camino, el único que pudo dar pelea fue el líder del grupo el cual fue el que tuvo la muerte más horrible por haber podido cortar la mejilla de Yendor, fue carbonizado hasta la muerte comenzando por sus ojos.

En la casa del bebé la madre estaba tapando la puerta con todo lo que encontraba y se preparaba para lo pero tomando el cuchillo el cual estaba en el cajón de la mesa. De un momento a otro la puerta explota en una enorme bola de fuego la cual desintegra todo lo que tiene enfrente, de salir bola de fuego salde Yendor como si de una sombra se tratase, la mujer espantada se da vuelta y empuña el cuchillo con temor, y lágrimas en sus ojos mientras corre hacia Yendor el cual la toma de la cabeza, la desarma y la lanza contra la pared. Yendor continúa su camino subiendo las escaleras tranquilamente mientras mira las paredes y camina a la habitación del joven como si pudiera olerlo, una vez dentro se acerca a el, lo toma en brazos, le mira a los ojos mientras intenta calmar sus sollozos.

Mientras eso pasa dentro de la casa en sus afueras, las tiendas, hogares y establos eran consumidos por las llamas de los discípulos de Yendor, las calles estaban cubiertas de cenizas y cuerpos carbonizados.

Yendor una vez que había logrado que el bebé se calme con su mano derecha lo sostuvo y con la izquierda empezó a preparar una bola de fuego la cual iría encaminada hacia la cabeza del joven, en ese justo momento alguien tomo la mano del anciano alejándola del bebé, era la madre que presuntamente estaba muerta, el mago dejo caer al bebé en la cuna de una forma muy brusca haciendo que la misma casi se diera vuelta y empezó a pelear con la mujer.

Esta pelea tomo menos de 5 minutos en los cuales el la desarmo y empezó a carbonizarle la cara con ambas manos pero ella se tiro junto con Yendor por la ventana así salvandole la vida al joven bebé, cuando ambos caen un hombre con una túnica que le cubre todo el cuerpo sale de las sombras en la esquina de la habitación, el mismo toma al bebe en brazos mirándolo con desprecio pero así como lo levanta se lo lleva antes de que el techo caiga sobre sus cabezas.

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???: Te gusto?-

el anciano mira a su nieto el cual se había dormido mientras contaba la historia-

???: jeje, se ve que te dormiste, descansa.

Jonathan el EderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora