Un error tras otro.

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Jane

No debí aceptar la invitación de el, se que es muy gentil pero no creo que sea buena idea  que me quede; Cuando termino lo que acabo de decir me da risa, por que ¿Desde cuando me importo lo que sea prudente o no?

Mientras el termina de hacer la cena, yo me relajo en el placentero sofá, tratando de tragar lo que paso y no volverlo a recordar.  Soy una imbécil por haberle dicho toda la mierda esa, el me salvo y fue muy bueno conmigo, no debí decirle todo eso;  Cuando por fin alguien me trata bien lo arruino todo, ¿Como no hacerlo? siempre fui una victima, a nadie nunca le importe,  ni a mis padres.                           Ellos siempre se centraron en mi hermano menor, ¿Como no importarle el? Siempre fue el mejor en todo, a el no lo violaron, a el nunca le hicieron daño, claro como no pudieron conmigo intentaron con el... y yo no existí, siempre fui un cero a la izquierda. Mis padres me prestaron un poco de atención cuando me violo ese tipo, nunca se percataron de mi o de las cosas que me pasan, Jamas.

Cuando termino mi mal episodio y recordatorios, huelo el rico aroma del arroz. Entonces el me llama que ya la cena estaba terminada.

-Bueno no quiero recibir ninguna queja de que esta feo eh. -Me lo dice con tanta ironía, y yo me rió, pensaba que era muy... Muy... antipático, pero es divertido dentro de todo.

-Esta bien, yo no cuestiono nada. -Le digo sin mas.

Comemos y al cabo de media hora el me lleva  hasta su cama, le doy las gracias por la amable acción y me tiendo en esta, tiene las mas suaves mantas y sabanas, es muy cómoda;Al cabo de unos segundos quedo muerta en su cama.                                                                                                                                       Al despertar me levanto y veo que no hay nadie, entonces me tomo el atrevimiento de hacerle el desayuno y se lo dejo en la mesita con una nota que dice: 

- Muchas gracias por tu atención y espero que nos volvamos a ver. Att: Señorita Colling.

Al regresar a mi casa mi madre esta sentada en el sofá, cuando abro la puerta ella me interroga preguntándome donde estaba. Le cuento la situación y ella se horroriza nada obstante pero al finalizar la charla, me dice que tenga cuidado. 

Es sábado por la noche cuando recibo  un mensaje de un numero privado diciendo así:

-Quiero verte esta noche, donde vos quieras. Por cierto soy Shen.

Cuando veo el nombre de Shen me altero, no es que me guste, pero tiene una sonrisa espectacular, cuando me mira siento que me hundo en pensamientos,  es un total extraño pero es encantador.  No tiene un físico robusto, es delgado y viste como un jugador de Basquet, no se... es como que... ¡Me encanta su sonrisa! Dios es hermoso, pero no se, no quiero ilusionarme con algo que se que no va a funcionar; Tiene esos ojos tan lindos y es muy bueno. Pero como dije.. y por otro lado esta ... No basta, no mas chicos.

Cuando termino mi dilema mental le respondo que si y que como soy nueva en la ciudad no se donde podríamos encontrarnos. El me contesta que me vendrá a buscar a mi casa y que me va a dar una sorpresa.

Cuando por fin  se acerca la hora, voy al  baño y me pongo unos shorts negros y una remera verde manzana con zapatillas deportivas, por alguna razón el me dijo que llevara unas. Llegada la hora, escucho unos golpecitos en la puerta, entonces abro, el viene es su coche, vestido como un jugador de Basquet; Tengo que admitir que se ve totalmente sexy vestido así, en cierta manera siempre se viste similar, pero a mi no me importa, fin y al cabo se ve muy hermoso. Cuando me subo a su coche me dice:

- Te pedí que vinieras con zapatillas deportivas por que quiero enseñarte a jugar Basquet, si no sabias, yo juego al Basquet.  -Me dice con una voz firme y segura. 

-Por algún motivo, la primera impresión que diste fue de que jugabas al Basquet. -Le digo y veo su expresión de aludido, entonces prosigo- En buena forma. 

-Ah bueno mejor. - Todo el trayecto estuvimos sin soltar una palabra, yo miraba por el espejo y pensaba en su sonrisa. 

Cuando por fin llegamos me abre la puerta y bajo. Le doy las gracias y me conduce hasta un enrejado que de pronto se abre y entramos. Llegamos a un lugar grande, un gimnasio. El se pone sus zapatillas y me dice que me sienta cómoda en el sitio.                                                                                          Me guía hasta un aro y hace una seña para que agarre una pelota, el hace lo mismo y la tira adentro del aro, entonces yo hago lo mismo y para mi sorpresa entra adentro de aro. 

- Muy bien, ¿Jugabas antes? - Lo dice con tanta felicidad en su voz, se ve que le encata este deporte.

- De hecho nunca juegue, mas bien nunca toque una pelota. -Le digo riéndome y el me sigue el gesto. 

Cuando lo intento varias veces me sale mal y el se ofrece a ayudarme, entonces asiento. 

-Mira tienes que pararte así -Me dice y se apoya tras mio, corre una de mis  piernas atrás y la otra adelante. Me sostiene de la cintura y siento como un calor se adentra en mi cuerpo. Entonces el dice: 

- Perdona no quería tocar tu cintura solo que no sabia como moverte. -Lo dice como tratando de retirar lo dicho, aunque veo un poco su cara enrojecida.- 

- Esta bien no importa. - Le digo corriendo mi cara para adelante. 

Entonces el posa sus brazos en los míos, yo sostengo la pelota y el me sostiene. Cuando me dice que me agache que el también lo ara, lo hago y empujamos la pelota, esta se emboca en el aro, entonces doy vuelta mi rostro con tanta alegría y me doy cuenta de la distancia tan corta en la que estamos, que puedo sentir como su aliento desemboca en las comisuras de mis labios. Siento ese deseo de cortar con esta  distancia y posar mis labios en los suyos, siento ese deseo tan terrible que hace que lo desee mas. Entonces el apoya su frente en la mía acortando mas la distancia. Pero cuando íbamos a dar el gran paso el se detiene y se aparta de mi. Los dos bajamos la cabeza. 

- Bueno creo que es tarde ¿Podrías llevarme a mi casa? -Es muy tonto de mi parte decir eso pero el asiente y creo que entiende que es demasiado incomodo seguir juntos jugando después de lo que acaba de suceder.

Cuando para enfrente de mi casa giro despacio para abrir la puerta  y el me detiene, veo cada rasgo de su cara, cada perfección. Siento como se lamenta por cortar ese beso, siento muchas cosas pero la verdad que no quiero engancharme, a penas lo conozco;  Cuando miro mejor veo que cerro los ojos, entonces apoya su frente en la mía. Me derrite saber que estoy a tan pocos pasos de besarle, que mis labios inunden los suyos y ... Estoy en un debate mental, cuando entonces siento sus carnosos labios apasionados cerrando y abriendo se en los míos. Me aparto y le sonrió, entonces bajo del coche. Esta vez fui yo quien corto el beso.



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