Te amo por accidente ( Jeff y tu)

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Han pasado cinco días después de la cita romántica con Jeff. En cierta forma se ha fortalecido nuestra no relación. No he vuelto a ver a Liu o a Zalgo, sin embargo, me hacen falta pero creo que Jeff me complementa.

- _____ se acabaron unas cuantas cosas, iré a comprarlas. – asentí y Jeff fue hasta el sillón y me dio un beso en los labios – yo... te amo - ¿me ama? –confía en mí – me volvió a besar y salió de la casa.

Jeff me ama... esto es irreal, es decir, estoy tan feliz que yo... Dios, podría morir.

Salté del sofá casi dando griticos de alegría, corrí hasta mi cuarto y rodé en mi cama.

Mi corazón late fuertemente y ¡no termino de creérmelo! Él me dijo que me amaba, es decir... ¡me ama!

Eran más o menos las siete de la noche, la verdad se me hacia una maldita eternidad esperar a Jeff, él es demasiado selectivo con lo que va a escoger.

Me acosté en mi cama después de haber caminado por toda la habitación durante un buen rato.

Mis ojos se fueron cerrando lentamente hasta que caí dormida.

Escuché unos pasos subir por las escaleras. La puerta de Jeff se abrió y escuché el crujir de la cama.

Después de unos segundos en silencio, escuché algo que nadie en mi lugar quisiera escuchar.

- ¡vamos Jeff! ¡más fuerte! ¡mas! – los gemidos agudos de alguna chica.

- Has silencio, posiblemente este mi novia – dijo un jadeante Jeff. Toda esta mierda de que me amaba era una mierda colosal.

- ¡Jeff! ¡te amo! – tragué saliva.

- Yo a ti – yo... a.... Ti... esto es todo. Guardé todo en mi maleta, pero me asusté al ver a Liu en la ventana.

El vio mi rostro y entró sutilmente. Me rodeo con sus brazos fuertemente.

- Fui una tonta – murmuré

- Sí, pero eres mi tonta – sollocé en silencio. La casa era inundada por los molestos gemidos de la chica y los de Jeff.

Liu me seguía abrazando, y por un breve momento me dio un suave beso en los labios.

- ¿nos vamos? – dijo Liu, asentí. Salimos por la ventana, un escape estrella.

Llegamos hasta un claro donde había una Harley Davidson, y era una moto increíble.

- ¿traes cascos? – el sonrió y negó.

- Soy un asesino, dudo que una mierda de estas me vaya a matar – sonreí, aseguramos mi equipaje y nos pusimos en camino a salir de aquel bosque.

Un trayecto de casi una media hora después, llegamos a la avenida principal.

- Ahora, por donde es – señalé hacia donde tenía que ir, porque estoy segura que si hablo...vomito.

Me aferré un poco más a Liu y recosté mi cabeza para evitar marearme aún más. Quedé ligeramente dormida, porque aún quedaban los asquerosos sonidos de aquella chica y Jeff, pero lo que más me dolió fue que él le dijera que también la amaba.

E inesperadamente empecé a sollozar en silencio, de verdad le creí cuando dijo que me amaba, fui una maldita estúpida.

Liu puso una mano en mi muslo y lo apretó suavemente.