Cartas al dolor » h.s

11.

Querida Danae.

"Nunca estuve seguro de ésto, no pensé que iba a dañarte tanto como lo hice. Lo siento: así sin más, sin puntos, sin signos. Sin nada más que agregar: Lo siento.

Siento haberte amado y haberte roto el corazón, eso nunca estuvo en mis planes, yo sólo quería mostrarme a mí mismo que podía vivir sin ti. Sé que lloraste, pero no más que yo.

Nunca fui capaz de darte la cara y decirte que, besé otros labios que no fueron los tuyos.

Y sé que si te hubiese dicho que fue un error tú no me lo hubieses creído. Qué tonto fui. Y sabía que a mi lado no ibas a ser feliz a causa de mi indiferencia. Por eso decidí acabar con lo nuestro, lo hice sin mirarte a los ojos, porque me dolía más que mil dagas en el corazón.

También sé que me viste con otra chica.

No tengo explicación para eso, pero sí sé que sus besos nunca fueron como los tuyos; dulces, suaves, delicados. Como el más perfecto día de verano.

No espero que me perdones, pero estarías en todo tu derecho. Yo sabía que debía decírstelo, pero por miedo a perderte no lo hice, y ese fue mi error, diciéndotelo o no, de igual forma no me lo hubieses perdonado.

Mira como un desliz rompe todo en un segundo.

Gracias por todo lo que me diste y perdón por el daño que cause en ti.

Te amo Danae Collins.

- Harry.