Aquarelle Moi. (Una chica, un lienzo)

Londres

Luego de una pelea con mí hermano sobre quién iría delante, en la que él ganó, nos encontrábamos de camino a casa de mí padre.

Zab iba hablando con Johann sobre algo de Soccer mientras yo veía por la ventana Londres. Mientras el carro se movía hacia parecer todo cómo siluetas, apoyé la cabeza sobre la ventana y seguí admirando lo lindo que era Londres. Mí nuevo hogar.

Recordé qué le había dicho a mí tía que la llamaría cuando aterrizará, no lo había hecho todavía. Eso sería lo primero que haría cuando llegue a la casa de mí padre. Iba tan concentrada en mis pensamientos que no me dí cuenta cuando el carro se detuvo. Levante la mirada y mire hacia donde Zab, quién ya me estaba mirando mientras me indicó con la cabeza qué saliera. Así hice.

-¿Qué hacemos acá chicos?

-Vamos a comer algo, enana. Johann tiene hambre.

-No sé porqué eso no me causa sorpresa alguna.

-Já, Já, qué graciosa.

-Vamos chicos.

Entramos a lugar y... Wow. Era muy lindo. Tenía un aire muy acogedor y una decoración temática referida a los años 80, estaba llena de personas, habían chicos y chicas en patines con bandejas y una pista de baile con una bola disco en el medio del local. Lo amaba.

Los chicos saludaron a una chica que estaba en patines y supuse qué ese era el uniforme de los qué trabajaban allá.

-¡Jade, acércate!

Y así lo hice, hasta llegar a donde estaban los chicos ya qué mientras estaba mirando el lugar, ellos habían avanzado algunos pasos. Le sonreí amablemente a la chica hasta que Zabdiel habló:

-Jay, ella es Valerie. Valerie, ella es Jade, mí hermana.

-Wow, sí qué se parecen, un gusto Jade, puedes decirme Val.

-Pues Val será.

-Vengan chicos, acá hay una mesa, enseguida les atiendo.

-Gracias Val.- Dijimos al unísono.

El lugar era genial y Valerie era una chica muy simpática a pesar de que no pude hablar mucho con ella porque estaba de turno. Según me explicaron los chicos ella iría con nosotros al colegio, en el mismo año.

¡Joder! ¡El colegio!

No había pensado en eso. Conocer nuevas personas, adaptarme a un sitio totalmente diferente de donde vengo con personas con diferentes culturas y simplemente todo esto es muy nuevo para mí. Estamos en las últimas dos semanas de vacaciones por lo qué las clases no tardan en empezar.

Nuevo país, nueva vida.