Mierda... ¡mierda!... ¡Soy idiota!
Ni siquiera sé a quien me estoy quejando... Sólo sé que como no salga de aquí me va a dar un ataque de pánico. Aunque... si pudiera ir al pasado haría exactamente lo mismo, porque soy idiota y muy cabezona. No me arrepiento de ser idiota, al menos así estaba a la altura correcta para que las "populares" entendiesen mi molestia, aunque creo que sus cabezas huecas no la habían entendido del todo.
Resulta que las "populares" del curso estaban muy aburridas y como no tenían ningún chico cerca para zorrearle decidieron meterse con Luna.
Luna... la chica que se suponía que era amiga de ellas, subnormales que la habían encerrado en el cuarto de los productos de limpieza.
Y claro... no les hizo gracia que yo les hablase con mi típico tono de voz molesto (que usaba cuando se trataba de idiotas):
-Que bajo habeis caído... Era vuestra "amiga" y ahora... cuando más apoyo necesita le haceis esto.
Algunas me miraron con molestia, otras asombradas (aunque intentaban que no se les notase). Se miraron entre ellas y asistieron, entre empujones y golpes acabaron encerrandome a mi también en el cuarto... con Luna.
Mi corazón latía con fuerza, estaba muy nerviosa por la presencia de Luna. No había pensado en las consecuencias de mis actos, quizás a ella le molestase que me metiera en "sus asuntos"; pero en vez de molestarse, levantó la vista del suelo; por primera vez desde que volvió y me dedicó una tímida sonrisa.
-G-gracias por defenderme- Susurró bajo.
-No te preocupes, todo estará bien- Le respondí aún sin mirarla a la cara, avergonzada, al igual que ella.
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¿Soy lesbiana?
ContoUna novela basada en mi y mis propias preocupaciones. Si crees que estoy equivocada en algún tema de los que trato en mi novela puedes decirmelo.
