"In The Dark"

Capitulo 1

"Miradas que asustan, chicos que gustan"

Sus brillantes ojos rojos me miraban como si fuera su presa, no le tenía miedo, pero aún así levante mi arma hacia él
-¡No te tengo miedo!- grite con todas mis fuerzas, soltó una carcajada, no había nada de gracioso en esto. Su voz gruesa hacía que el pánico empezará a correr por mi cuerpo.- No le temes a nada- susurre para mí misma, mi padre era un cazador, no tenía porque temerle a él, no le temía a nada.
-¿No me tienes miedo?, puedo escuchar tus latidos ir rápido, ¡te estás mintiendo a ti misma niña!- salí detrás del árbol donde me ocultaba y apunte hacia su pecho, sus ojos eran lo único que se veía en la oscuridad del bosque, sus ojos y sus enormes colmillos.
-Mataste a mi padre sin importarte si yo me quedaba sola, había confiado en ti Adam, me utilizaste solo para llegar a mi padre, para terminar lo que tu hermano no pudo- había algo en mí que sabía que lo que acababa de decir lo alteraría y seria capaz de arrancarme la garganta con sus colmillos, cerré los ojos y respire hondo, mi padre me había enseñado que así es como se calma el miedo. Cuando volví abrir los ojos, ya no lo veía, y otra vez mi pulso se aceleró, mi vista se nubló, él podía controlar mis sentidos y eso era lo peor. No podía ver nada, me quede quieta con el arma en alto, lo sentí correr a mi lado, y luego su respiración estaba en mi cuello.
-Amber, no tienes porque temer, tú no le temes a nada- su tono sarcástico hizo que me enojara
-No seas cobarde Adam, pelea como el hombre que dices ser- mis palabras lo hicieron enojar más, mi vista se iba recuperando poco a poco, y cuando pude ver bien, él estaba enfrente de mi, con los ojos rojos y sus colmillos grandes y brillantes, lo apunte y cuando apreté el gatillo, sonó el timbre que indicaba que la última clase había terminado.
-Esta vez lo hicieron mucho mejor chicos, Cherry me encanto tu actuación, lo sentí real, tú miedo, tu furia, todo se vio real-
-Gracias profesor Wood, solo trato de dar lo mejor de mi- me gusta esto de la actuación, por algo había entrado a Teatro.
-Muy bien Cherry. Connor, creo que tú sí deberías esforzarte un poco más, estás mejorando, pero te hace falta el toque- para el profesor Wood el Teatro es como su vida, desde los 7 años de edad le gusta la actuación y según él, se ha presentado en obras muy importantes de Broadway. Tome mi mochila y salí del salón de Teatro. Como siempre, ahí estaba Vanessa esperándome.
-¿Qué harás esta noche?, espera no me digas, "tengo que estudiar Vanessa, con el equipo de debate, el examen de química y la obra que se presentará dentro de dos semanas no tengo tiempo para nada"- imito mi voz e hizo muchos movimientos con sus manos, como según ella dice, yo lo hago.
-¡Yo no hablo así Nessa!- ella rodó los ojos e hizo un gesto gracioso por el cual no pude evitar reír- Sabes que la escuela es muy importante para mí, y más ahora que es mi primer año en la preparatoria- llegamos mi casillero y Vanessa se recargó en el de a lado. nuestros casilleros no estaban juntos, el de ella estaba por el pasillo de la entrada, y el mío estaba cerca del salón de Teatro, ya que así lo había elegido, a ella no le dieron la oportunidad de cambiar de casillero ya que dijo el director que si también la dejaba a ella, después todos iban a querer un cambio.
-Se que haz soñado mucho con el día en el que llegaras a la preparatoria y esas cosas, pero no todo se trata de estudiar- se quedo un rato pensando y luego dijo en voz baja- tal vez si, pero no del todo-
-¿Qué habrá hoy por la noche?- la verdad no me importaba mucho lo que pasará, solo que no quería que Vanessa se sintiera mal por tener una amiga que le importan demasiado sus estudios.
-Harrison hará una fiesta, nadie sabe el motivo de ella, pero ya sabes que Harrison hace fiesta por todo lo que pase- Harrison es el típico hijo de padres casi millonarios, tienen una casa demasiado grande, y sus padres nunca están en casa, así que él para no malgastar su enorme mansión, hace una fiesta cada vez que quiere. Y según todos sus fiestas son las mejores. - Por cierto, el chico nuevo estará ahí- Me guiño y luego salió corriendo, yo solo rodé los ojos. Vivimos en Jefferson una ciudad en el condado de Marion en Oregon, es una ciudad con 2,290 habitantes, la mayoría se conocen, y sabes rápidamente cuando llega alguien nuevo.
-No entiendo que tiene que ver el chico nuevo-
-¡Por dios Cher!- sus gritos me sobresaltaron y ella me miró con una sonrisa perversa
-Realmente no sé de qué me hablas- busque mi iPod en mi mochila y conecte los audífonos
-Todos en la cafetería vieron cómo se te quedo mirando, ¡y cómo te le quedaste viendo tú!-
-No seas exagerada Nessa, solo le sonreí como bienvenida y listo- me coloqué los audífonos y le puse play, escuche la risita de Vanessa antes de que Don't Stop de 5 Seconds Of Summer sonará.-Mejor llévame a casa.
En el auto de Vanessa, estuve pensando en lo que había pasado con el chico nuevo, o como lo llama Nessa, el nuevo Zac Efron. Sus ojos grises fueron directo hacia mí, como si me estuviese buscando, su mirada se sostuvo con la mía por un largo tiempo lo cual me asusto ya que nadie me había mirado así antes, después sonrío y me guiñó un ojo, todos en la cafetería se voltearon a verme, algunos con asombro, otros con curiosidad, pero la mayoría con odio y envidia.
Bajé del auto, y antes de dar la vuelta para entrar a mi casa Nessa habló.
-¿Te veré en la fiesta o pasó por ti?-
-Sabes que no iré, tengo que estudiar, y el grupo de debate se reunirá el lunes, tengo que prepararme- el grupo de debate era algo bueno, me ayudaba con mis calificaciones y me daban una beca si mi promedio en el primer semestre era de 10.
-Cherry, llevamos dos semanas en la preparatoria, y las dos semanas estuviste estudiando, preparándote para la obra y esas cosas. Tienes que darte un descanso Cher, tú eres muy inteligente, y sé que si estudias sábado y domingo estarás lista para el debate, yo sé que tú puedes- levanto sus dos pulgares, siempre hacía eso para que me sintiera segura. En mi primer debate me sentía demasiado nerviosa, ella solo levanto sus dos pulgares y sonrío, gracias a eso mi  equipo gano
-¿A qué hora dices que es la fiesta?- su sonrisa se hizo más grande y sus ojos brillaron
-8:30, pero es mejor llegar tarde, pasaré por ti a las 10- me lanzó un beso y aceleró el auto, seguí el auto con mi mirada hasta que se perdió en una curva.