Foster estaba más que segura, ella sabía quién tenía a Alexa, y no le cabía ninguna duda. La agente y unos diez policías se dirigían a la casa del culpable.Foster bajó de la camioneta, mientras los polícias tiraban la puerta abajo, al segundo que la puerta cayó, entró silenciosamente con su arma en una mano, y una linterna en la otra.
Pasó a la habitación y encontró al culpable, allí, durmiendo con tranquilidad.
Cuando Foster vió que se movía levantó el arma apuntándole en la cabeza.
—Señorita Anna, está arrestada por secuestrar a Alexa Brooks el día 18 de Enero de este año —dijo Foster, que se acercaba a ella y le ponía las esposas.
—¿Qué? ¡Yo no he hecho nada! —insistió asustada.
Un polícia entró por la puerta, agitado.
—Encontramos a la niña, estaba en una habitación, atada de manos y pies... por suerte aún sigue viva —dijo él.
—¿Así que no has hecho nada, eh? —Foster la tómo y la sacó de la casa para meterla dentro de la patrulla.
—¡Ella es mi hija! ¡Es mía! —chilló la Psicóloga.
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Alexa
Short Story"Ni pistas, ni culpables, ni cadáver" La agente Foster del FBI tiene un nuevo caso. El día 18 de Enero de 2016 desaparece Alexa Brooks, una pequeña niña de once años. ¿ALEXA, DÓNDE ESTÁS?