Amor de primos

Mi primo

Narra Alexis
Era la fiesta de mi tía, estábamos toda la familia junta. En mi mesa estaba mi papá, mi mamá, mi hermanita, mis abuelos y mi primo. A pesar de que tengamos la misma edad el me llega a la altura de los hombros y está muy delgado, no digo que yo esta gordo pero tampoco estoy tan delgado como el. Ese día, como a las 9:30, me pidió que lo acompañara a su habitación. Cuando llegamos se empezó a cambiar de ropa, se quitó todo y se quedó en bóxers, aquella escena provocó que me sonrojara.
Alexis: Ya ponte algo de ropa.
Max: No quiero, me gusta estar así. Si por mí fuera ya estaría desnudo.
Alexis: *sonrojado* exhibicionista!
Max: ¿Por qué? A mí me gusta estar así. A parte, no tiene nada de malo el único que me ve en estos instantes eres tú.
Alexis: Aish! Haz lo que quieras
Max: Bueno.
Tras decir aquellas palabras Max se quitó los bóxers lo cual hizo que me pudiera aún más nervioso y sonrojado. Me acosté en la cama para evitar verlo, pero cuando me doy cuenta estaba acostado detrás mío.
Alexis: Qu...qu.. ¿que haces?
Max: No tiene nada de malo, somos primos.
Alexis: Quítate! Por alguna razón esto me hace sentir incómodo.
Cada vez se acercaba más y más hasta que llegó un momento en el cual pude sentir su polla rozando mi culo. Esta sensación es extraña pero reconforta le a la vez.
Alexis: E- est- estás encima, muévete!
Max: No, me quedaré así el tiempo que quiera.
Al acabar de decir aquellas palabras me abrazo por detrás. Mientras más me intentaba zafar, más me apretaba y mientras más me apretaba más sentía su polla en mi culo. Después de un rato de estar así, sentí como se acercaba a mi cara cada vez más y más.
Alexis: M- Max...- dije algo nervioso y sonrojado, y sin previo aviso me mordió la oreja.
Alexis: ¿Qué te pasa? ¡¿Por qué me mordiste?!
Max: Tenía ganas.
Alexis: No tienes que hacerlo!
Max: No me importa. - dijo sonriendo.
Me quede en shock con lo que había dicho, pero eso no fue lo peor, lo peor fue que sin darme cuenta el ya estaba encima mío.
Alexis: M- Max..
Max: ¿Qué? ¿No te gusta?- dijo lo anterior mientras pasaba sus labios por toda mi cara.
Alexis: No, es incomodo.
Y lo siguiente que hizo fue besarme bruscamente en los labios.
Alexis: ¡S- Suéltame!
Max: No quiero.
Alexis: Por lo menos deja de besarme!
Lo último no se me pudo enterare bien porque Max estaba metiendo su lengua hasta mi garganta y no podía hablar. A pesar de que, a mi punto de vista esto era desagradable, se sentía re confortable y satisfactorio.
Alexis: M- Max...
Max: No digas nada y has lo mismo que yo.
Alexis: Esta bien.
Después de decir lo anterior nuestras bocas se unieron de tal manera que hubo un baile perfecto entre ellas, el mismo ritmo, aunque me resulte un poco incómodo, este beso es simplemente perfecto, cada besos, cada caricia. Todo junto era como el paraíso, todo iba perfecto, hasta que nos interrumpió el ruido de las escaleras al subir. Era su hermano mayor el que estaba subiendo, rápidamente me quite de encima y me senté al otro lado de la habitación.
Leo: Chicos, ya va a acabar la fiesta y quieren que bajen para estar todos juntos en la foto.
Alexis: Ya vamos.
Max: Que esperen un rato, tengo que acabar de hacer algo.
Al escuchar eso me sonroje tanto que quede a un rojo más intenso que el de un tomate.
Leo: Esta bien, no se vayan a tardar mucho y Max, ponte ropa.
Cuando salió Leo (el hermano de Max) Max se empezó a vestir, se puso la misma ropa que traía antes.
Max: Aish! Como odio traer esta ropa.
Alexis: Ya vámonos, nos están esperando.
Max: Espera.
Dicho eso Max me jaló y me besó otra vez, no era un beso brusco y a la fuerza, era un beso tierno y con cariño.
Max: Terminaremos esto algún día.
Alexis: ¿Terminar que?
Sin responderme, Max bajo las escaleras y se fue a la mesa con los demás invitados dejándome ahí en su cuarto con la pregunta de la cual temo su respuesta.