Fight against all odds

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Día 3. 08/01/2016

9:17 p.m.

Continuando con el relato con el que termine la historia de ayer, recuerdo cada detalle, de cuando le pedí que fuera mi novia, fue algo duro para mí ya que recuerdo muy bien que le envié el mensaje de petición a las 9:48 a.m. y no sé si era sufrimiento o desesperación pero recuerdo que ella no estuvo activa durante todo el día, su casa está cruzando la calle de un centro comercial y ese mismo día yo fui al súper mercado de ese centro comercial, no me despegaba del celular, miraba su ventana de mensajes cada 2 o 3 minutos, después de ir al súper fui a comprar zapatos, negros de lustrar, recuerdo muy bien y con detalles ese día, justo enfrente del local de zapatos había un kiosco en el que vendían todo tipo de bisutería, compre una pulsera con perlas color cian y color magenta con un corazón en el centro que llevaba su nombre.

Aunque yo sabía que había posibilidades de que ella no aceptara ser mi novia ni siquiera pensé si comprarla o no, yo la compre.

Luego de eso salimos a cenar a un restaurante mexicano llamada "La Taquería" hoy en día ya no existe, pero recuerdo bien que pedí unos tacos al pastor, nachos con guacamole y 2 coca colas enlatadas.

Seguía viendo el celular cada 2 o 3 minutos con la esperanza que el punto verde que significa que estaba activa en Facebook apareciera al lado de su nombre.

Comí con el celular justo a la par de mi plato, ella nunca contesto al llegar a mi casa me duché, me vestí con ropa más cómoda y me recosté en mi cama luego de un largo día, también recuerdo que fue un sábado en el que mis abuelos no estaban en casa y por lo tanto tuve que irme a dormir a su casa para cuidar a mi bisabuela, eran las 9:48 p.m. cuando me disponía a dormir justa y exactamente 12 horas después de haber enviado ese mensaje cuando sin esperarlo su mensaje llego.

Ella poco tiempo atrás había sido lastimada, lo cual me lleva a el tema de ayer, desconfianza, sin ganas de aceptar entrar al reto del amor, ella decía que no quería ser lastimada, yo le dije que no quería lastimarla sino hacerla feliz, ella seguía sin creer y recuerdo haberle dicho "Solo una oportunidad" hablamos de eso casi por 45 minutos hasta que decidió aceptar e intentarlo.

Dos días después de haber comenzado nuestro noviazgo, un noviazgo que creí que sería para siempre, que me hacía sentir capaz de todo, que me quitaba las ganas de pensar en alguien más, un noviazgo de dos días al que no podía pedirle más, 2 días después de haberle pedido esa oportunidad fuimos a la feria, en las vacaciones de agosto, recuerdo que mi mano sudaba demasiado al tomar la suya, recuerdo que al verla mis ojos brillaron de una manera impresionante, que cuando la abrazaba su aroma quedaba en mi ropa, recuerdo cada detalle, decidimos caminar a su casa, eran quizá un kilómetro y medio de camino pero lo disfrute, me sentía tan pero tan feliz, pasamos por el mismo centro comercial de enfrente de su casa y le compre una bolsa de golosinas en forma de corazón, despedirme de ella fue duro y hasta hoy no entiendo por qué pero bueno al llegar a casa hablamos por teléfono, al día siguiente ella lo termino todo, yo tenía la ilusión de una relación quizá no infinita pero si duradera, quizá no un "para siempre" pero si de poder decir "lo mucho que estuvimos juntos", el único recuerdo que yo pude tener fue el de ese día en el que su mano toco la mía, sus labios rozaron los míos y su abrazo me acogió.

Pero sigo sin entender como pude querer a alguien tanto en tan solo 2 días, solamente 2 días, en los que me sentí capaz de todo, todo en absoluto, ese día llore más de lo que pude haber llorado en mi vida hasta el día de hoy, caí en una depresión desde el 6 de agosto, martes 6 de agosto del 2014, hasta el 24 de junio de 2015 en el cual con la ayuda de amigos y amigas decidí comenzar a olvidarla, al principio fue difícil borrar todas sus fotos, luego sus conversaciones, jamás logre borrar mis recuerdos, pero tuve que hacerlo, puede que hayan muchas personas como yo en el sentido en el que el amor nos dañó pero seguimos creyentes en que las personas buenas están afuera, esperando a encontrarnos, con ganas de entregar todo de ellos.

No debemos tener miedo a entregar nuestros sentimientos a alguien, no sabemos lo que puedan hacer con ellos pero si les aseguro que las primeras veces puede doler mucho y la segunda también luego sigue doliendo pero ya tienes desarrollado cierto método de defensa que aunque no te proteja por completo, puede bloquear un par de golpes en el cuarto intento ya no serás la persona vulnerable que todos creen o la persona débil, serás alguien a quien por más que sea lastimado estará listo para evadir los obstáculos y golpes que la vida nos da.

Solo no sean negativos, no sean fríos, no se cierren a lo que la vida los envié, porque cuando él o la indicada llegue no lo sabrán y es allí cuando otra persona que cree en el amor y quiere hacerte creer salga lastimada, no debemos cerrarnos a las propuestas de los demás, debemos por lo menos intentar ser felices con él o ella, y si no es posible pues piensa en que después de las tormentas está el arcoíris, no dejes la idea de ser feliz atrás.

Jamás te cierres a quien trate de hacerte feliz, porque no sabes que daño causaras en el corazón de los demás.

165 DaysDonde viven las historias. Descúbrelo ahora