Abriendo Caminos

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Jake corría por el sendero dentro del parque, a un trote intermedio, respiraba y exhalaba cuidando de que su garganta no se secara.

Su cabello húmedo por el sudor se pegaba en su frente, uno que otro se movía con el aire. Tenia los audifonos puestos y de su Ipod sonaba la canción Broken Crown del grupo mumford and sons, con el volumen de la música a un nivel medio bajo, que le permitía escuchar sus alrededores.

Frente a él corría un hombre más alto que el, de tez blanca y cabello relativamente corto, teñido de azul.

Su espalda era ancha, bajo su ropa deportiva podía ver las extremidades si no tan musculosas si bien definidas. El hombre, sintiendo la mirada de Jake volteo sobre su hombro y curvando la comisura de sus labios, le sonrió y aumentando la velocidad, se alejó.

Sonrojandose un poco, Jake siguió su camino, hasta llegar a una de las zonas de descanso. Respirando agitadamente, Jake se puso en cuclillas, haciendo fricción y luego volvió a ponerse de pie. Sentándose en una de las bancas suspiro, en ese momento su garganta dolía debido a lo ocurrido con el gigante y se arrepintió de haber salido a correr; con el borde de su sudadera se limpió el sudor en su frente.

Aún era muy temprano, y el sendero estaba casi vacío, solo se había topado con unos cinco corredores, seis si contaba al hombre de cabello azul.

Hola- hablo una voz masculina a su lado. Jake levantó el rostro y se topó con el susodicho. Sus ojos se vieron con los grises del desconocido.

Hola- le respondio Jake, poniendose de pie.

No pude evitar hablarte, lo siento- rió el de pelo azul- pero no conozco a muchos por aquí y estoy intentando hacer amigos.- Jake notó que su inglés era diferente.- Soy Valentine- sonrió extendiendo su mano.

umm... Soy Jake- respondió estrechando su mano. El extranjero tenía un agarre firme.

Bueno Jake, aun tengo que recorrer dos kilometros antes de volver- Valentine se agacho y abrochó una de sus agujetas- espero y nos encontremos de nuevo por aquí. - y dicho esto, el peliazul dio media vuelta y se marchó trotando a paso rápido.

Sin entender aún qué había pasado, jake siguió su camino, corriendo medio kilómetro más antes de volver a casa.

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Luego de tomar una ducha, jake se vistió con unos jeans grises y un suéter de color azul marino. Tomo su mochila donde guardaba parte de su uniforme y salió en direccion al precinto.

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Llegó al edificio, saludando a los oficiales y trabajadores que se encontraba en el camino. Subió al elevador y llegando a su piso, entró en los vestidores.

Dentro estaban los oficiales Donny Benson, James Darcy, William Jones y Sho Fujita, a quienes saludo con ánimo.

Llendo a su casillero, Jake sacó de su mochila lo que necesitaba y comenzó a cambiarse, quitándose primero el suéter, mostrando su abdomen plano. Escucho un silbido cuando pasaba la tela por sobre su cabeza, una vez se deshizo de esta vio James Darcy quien junto a su compañero Sho, sonreían y le soltaban piropos en forma de burla.

Bonito tatuaje Vickers- dijo Darcy levantando su brazo y mostrando el suyo- pero no tan bonito como este.- los oficiales rieron cuando vieron como Darcy jugaba con sus brazos , haciendo que el escorpión en su tricep se moviera como si estuviera bailando.

Riendo, Jake terminó de arreglarse y salió a la sala de reunión, donde el inspector en jefe les leía algunos boletines y les daba información sobre lo necesario o lo que se podía encontrar en las calles.

Cuffs: sanando a JakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora