Cuffs: sanando a Jake

Londres 1.5

N/A: siento que este capitulo sea tan corto, al igual que el año que me tomo volver.  El siguiente capitulo casi esta completo, pero decidi cortarlo y darles este pequeño avance. 

Gracias por 

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La mesera llego a la mesa y Jake soltó la mano de Nathan.- Oh, lo siento. Se disculpo la mujer- interrumpí algo importante, ¿no es así?- Jake negó.

-¿Puedes traernos dos copas de vino, rosa espumoso, por favor? – pidió Jake a la mesera, quien asintió.

- ¿Ya saben que desean cenar?- Nathan vio su menú y Jake le imito.

- Quiero el rizoto con langosta como plato principal, y de entrada, una ensalada cesar, por favor. – entrego su menú a la mujer, quien asintió y volteo hacia Jake.

- Yo quiero una crema de brocoli y quisiera el filete, por favor, termino medio, y sin la cubierta de cebolla.- La mesera asintió, tomando el segundo menú, repitió la orden y se retiro del lugar. Jake aprovecho el momento para ponerse de pie.

-Disculpa, necesito ir al baño.- camino hacia el baño de hombres, apoyándose contra la pared del tocador, una puerta antes de entrar al baño. Suspiro y se apoyo al lavamanos. Se miro al espejo, su reflejo, un rostro que poco a poco perdía sentido. Sintió un enojo en su interior. Le gustaba Nathan, a pesar de conocerlo por poco tiempo, él le gustaba, pero el miedo a que Simon se acercara demasiado, a que quiera lastimar al hombre, hacia que Jake deseara nunca haberlo conocido, así Nathan estaría a salvo de todo el drama que implicaba estar cerca de Jake y su destrozada autoestima.

La puerta se abrió de nuevo y Nathan entro, abrazo a Jake y le jalo hacia el. Volteando su cuerpo, quedando cara a cara. Entonces el cuerpo de Jake quedo entre la puerta y el cuerpo de Nathan. Nathan beso sus labios con fuerza, bajo al cuello y mordió con ligereza, haciendo apenas cosquillas en el policía. Jake dejo salir un leve jadeo y recibió los labios de Nathan de nuevo, abrazándose al cuello del mayor, y siendo abrazado por la cintura. – Lo dije enserio- susurro al oído de Jake. Pero no debes responder si no quieres, y si quieres, puedes decir que no, pero por favor, no dejes que el fantasma de ese tipo evite que vivas tu vida. Yo te protegeré Jake.

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Cuando volvieron a la mesa, la mesera les esperaba con una botella de vino rosado, les mostro la botella y cuando Jake asintió con la cabeza, sonriendo, ella le devolvió la sonrisa y abrió el vino, sirviéndolo en las copas.

-Si me permiten, este es de mis favoritos, suelo comprarlo cuando quiero celebrar algo especial con mi esposo, o simplemente quiero recordarle que lo amo. – Ambos hombres sonrieron ante el comentario.- supuse que ustedes están celebrando algo especial, por eso quise traerles este.

-Muchas gracias- respondió Jake- él es especial- dijo viendo a Nathan, quien se sonrojo, causando risas ligeras por parte de los otros dos.- Es un hombre muy especial para mi. Nathan le beso en la mejilla y Jake se sonroso. La mesera observo la escena con un brillo de ternuras en sus ojos, sonriendo de oreja a oreja.

- por favor, es demasiada ternura- dijo la mujer. Dejo la botella dentro de una cubeta con hielo sobre la mesa al tiempo que Nathan abría la silla de Jake para que este tomara asiento. Cuando ambos estuvieron sentados, la mesera acomodo las copas frente a cada quien y espero a que le tomaran.

-Esta delicioso- dijo Nathan- tienes buen gusto.- comento a la mesera, quien agradeció, esperando el comentario de Jake. Este asintió con la cabeza y repitió el comentario del fotógrafo. La mujer sonrió y haciendo un ademan con la cabeza, se retiro a continuar con su trabajo.

La platica no tardo en iniciar, un tema ameno, hablaron sobre el lugar y sobre las personas que estaban cenando. Observaban parejas y creaban historias desde las parejas en su primera cita, hasta los que estaban con sus amantes con el miedo de ser encontrados por su verdadera pareja. Jake incluso llego al punto de crear sus conversaciones, causando risas por parte de Nathan.

Cuando sus platillos llegaron, el ambiente entre ellos era agradable. Las risas fluían libremente y podían hablar prácticamente de cualquier tema. Comieron con tranquilidad, disfrutando de los sabores de sus platillos e incluso, compartiendo del otro. Al terminar de cenar, Nathan pidió la cuenta, dejando una considerable propina para la amable mesera que les atendió.

Salieron del restaurante y caminaron por la calle. En un punto, Nathan rodeo con su brazo por los hombros de Jake, acercándolo a él. Jake se dejo, y acomodo su cabeza sobre el hombro del mayor. – Londres es hermoso- dijo Jake una vez llegaron al auto.

-Si- respondió Nathan- es un lugar agradable, pero Brighton es mejor.- Pegando su cuerpo al de Jake, Nathan le beso nuevamente, acariciando los costados de su cuerpo, causando que Jake sintiera escalofríos.

-Nate...- gimio Jake- Nate... espera. – Jake interpuso sus manos sobre el pecho de Nathan, separándole de él. – lo siento, es solo que... - miro hacia sus pantalones, sonrojándose. Nathan dejo escapar una risa leve, algo ronca y volvió a los labios de Jake. Esta vez, solo por unos segundos antes de volver a separarse.

-Dime que quieres, Jake- susurro al oído de Jake- Dime y lo hare.- Jake mordió su labio y cerro los ojos, suspirando. Sin mediar palabra, Nathan abrió la camioneta, permitiendo que Jake entrara, para luego caminar al lado del conductor. Encendió el motor y condujo hasta salir de Londres, entonces desvió la camioneta del camino, entrando a la tierra que le llevaría a la profundidad del bosque. Cuando llego a una zona cubierta, lejos del camino, apago el motor y bajo, caminando hacia la cajuela, sacando una manta que usa cuando tiene que hacer tomas desde el suelo y una lampara. Cerro la puerta y camino hacia donde Jake, esperando a que este bajara.

Una vez cerraron el auto, Nathan camino, siendo seguido por Jake. Caminaron hasta que llegaron a la orilla de un lago, en una zona cerrada, privada. Nathan acomodo la manta en el suelo e invito a Jake a que se sentara en ella. Nathan le siguió y una vez que ambos estuvieron en la manta, el fotógrafo volvió a besarle, mas libremente, esperando a que Jake respondiera con la misma intensidad.

Después de un rato, se dejo caer sobre Jake, empujándole ligeramente hasta que Jake estaba acostado, y Nathan se acomodo entre las piernas del menor. Le besaba en los labios, las majillas, la barbilla, el cuello, mordiendo. Sus manos viajaban por el torso del policía, adentrándose en la ropa, acariciando la piel, pellizcando ligeramente, mientras Jake solo dejaba escapar gemidos placenteros. Pronto Nathan bajo a besar el torso, el abdomen el vientre hasta que llego a la zona intima de Jake, causando que este empujara contra Nathan, sentándose rápidamente.

-lo siento, creo que me sobrepase- dijo Nathan. Jake negó con la cabeza, acercándose al fotógrafo.

- No, lo siento, es solo que, me asuste, lo siento. – Tomo las manos de Nathan, dejándose caer, llevándose consigo a Nathan, quien cayo sobre él. Esta vez Jake tomo la iniciativa, tomo con sus manos el rostro de Nathan para besarlo, y luego, recorrido con sus manos la espalda de este, metiéndolas dentro de su ropa. – hazlo, Nathan, por favor.

Un crujido de maleza, pasos casi desapercibidos y luego gritos, gruñidos, golpes, hasta que todo oscureció.