Capitulo 3: Conociendolo...?

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Luego de llegar, Pamela se puso a preparar sandwiches en la cocina con Alejandro, Ariel estaba en la habitación de su prima y Lorenzo en la entrada fumando.
Ariel se encontraba sentada en el balcón de la habitación de Pamela, sentía la paz de estar sola, estar con su amada soledad, ella se sentía llena estando sola, por más que todos dijeran "Estar solo es lo peor que hay", pero ella no lo concideraba así, estar rodeada de gente significaba poca privacidad, tener amigos equivalía a, tarde o temprano, traición, falsedad y hipocresía... La soledad era sumamente deliciosa, cuando estar acompañado significaba odio y rencor, vergüenza y angustia.
Para su suerte, su forma de ser había hecho que muy poca gente se le acercara, ya que, ¿quién soporta a una adolescente sarcástica e irónica que ama la muerte y desearía ser parte de ella, que goza de la oscuridad y se siente parte de ella, realmente, quién en su sano juicio se sentiría seguro junto a una chica que con solo mirarla notabas su odio y dolor? Nadie, esa es la respuesta, absolutamente nadie, y por eso había conseguido tantos problemas, sus "amigas" eran una más falsa que la otra, decían retractarse y lo unico que hacían era volver a lastimarla y a hacerle daño, por eso su unico amigo fiel de carne y hueso era Mike, que despues de todo, jamás la había abandonado.
Su mirada se perdía en el horizonte, veía las montañas y suspiraba, deseando estar ahí sola y tranquila, como lo estaba en ese momento, pero como dicen....... Todo lo bueno dura poco. Sintió la presencia de alguién y antes de darse cuenta, un castaño tomaba asiento junto a ella.

-Sabes? A mi también me gusta estar solo -dijo mirando hacia la nada mientras que Ariel lo miraba seria, ya que estaba odiandolo por traerla a la realidad, el la miró de reojo y se volteó completamente a ella.
El castaño le sonrió amablemente y ella solo volvió su vista a la nada.

-En ese caso te recomiendo que me dejes en paz y vayas a estar solo en otro lado- dijo mirandolo a los ojos, el solo sonrió aún más y ella fruncio el ceño ¿Por qué este chico le sonreía? No hacía ni tres horas de haberlo conocido y ya lo estaba detestando - ¿por qué sonríes como un idiota? -dijo dejando salir su vómito verbal.

-Por que creo que aveces es bueno estar acompañado, y más con alguién que desea lo mismo que uno mismo -Ariel lo miró raro ¿A que iba este tipo?, el le sonrió nuevamente y luego regresó su mirada a la nada- me refiero a que se lo que sientes y por que lo haces.... Y que mejor compañía que alguién como tú. -Ahora Ariel se encontraba en un estado de shock, ¿de donde había sacado el que ella era buena compañía? No se habían visto nunca y el la trataba de buena compañía, no es que a Ariel le molestara, solo se sorprendia que un chico que había conocido hace menos de 2 horas, hablara con ella como si fueran conocidos o amigos talvez.- Eres tan tetrica y misteriosa, callada y al mismo tiempo hiriente con lo que dices... Eres un demonio con ropa de angel. -Ahora ella lo fulminó con la mirada, ¿Que diablos le pasaba al idiota este? El imbecil se sintió observado y la miró de reojo y sonrió de lado - ¿Ves? Eres impresionante, veo que te enojas facilmente, tus mejillas toman un color rojo que contrasta con tu palidez. -Ariel se hartó y se paró de golpe y miró al castaño desde arriba mientras este la observaba curioso y con mirada divertida-

-No hables de mi como si me conocieras, y si mi prima te ha contado algo de mi.... Pues te ha dicho puras idioteces -dijo levantando la barbilla, el castaño se puso de pie y la miró desde arriba, ya que le llevaba una cabeza, ella lo miró desafiante -no se quién eres y tampoco me interesa saberlo, te quiero lejos mio.

Y tras eso se volteó y se encaminó a la puerta, pero se vió interrumpida por una mano que la sujetaba, se volteó y vio como Lorenzo la miraba de lado, con una expresión de asombro y diversión.

-¿Enserio? ¿No me reconoces Ariel? Hace casi 6 meses estamos en la misma clase de mangaka y seguís sin reconocerme....

Dijo más bien para si mismo, Ariel lo miró confundida y empezó a pensar, era cierto que lo había visto en la plaza esa vez..... Pero no recordaba haberlo visto en su clase, aun que claro, ella solo iba y se sentaba en el ultimo lugar y dibujaba lo que el profesor Tatsumi les indicaba. -Aun que ahora que lo pienso, entre que tú pasabas de largo y te escondias y yo con mi capucha y mis auriculares era obvio que nos ignoraramos... Pero hace unos meses antes de que las clases terminaran te pedí un lápiz, y te vi y me viste -Ariel fruncio el ceño e intentó hacer memoria....

Inestable Y CaprichosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora