Inestable Y Caprichosa

Capitulo 1: Demons

- Se que aveces decimos cosas y herimos sin sentido, ni razón. Aveces actuamos siguiendo nuestros "instintos" y no hacemos más que hacer daño a los que nos rodean, las acciones y palabras y hasta gestos pueden lastimar a alguién, no tomes por inocente una "breve" palabra que pasó por tu cabeza en tono sarcástico, y en lo mas profundo de tu ser, sabes que lo que dijiste.... No está bien Ariel-

-¿Piensas dejarme en paz? -frutrada empezó a arañarse los brazos-
-Aun la sesión no termina Ariel -dijo la mujer de cabellos negros y lacios- Hemos acordado un horario con tus padres y debemos cumplirlo, recuerdas? Ahora, procuremos seguir con la sesión , debes medir tus palabras por que no todos están al tanto de tu enfermedad....
-Querrás decir Demonios - la psicóloga la miró mal y negó.
-Tu enfermedad, no estas endemoniada-
Ariel bufó, odiaba cuando su psicóloga empezaba con sus discursos de dos horas, sin tener en cuenta que si estaba enterada, y muy bien, que sus padres habrían acordado 1 hora de sesion terapéutica con su psicóloga todos los lunes y miercoles, de 7 a 8 am, y sinceramente, la estaba cansando. Desde que las vacaciones empezaron y ella de aisló, sus padres no hicieron otra cosa que meterla en actividades que ella odiaba. Después de la maldita sesión debía ir a una clase de pintura con su madre. No es que odiase a su madre, ni que odiase la pintura, si odiaba tener que salir de su casa y soportar gente que no conocía y ni siquiera soportaba, sin mencionar, claro que no tenía paciencia para la pintura.
Al parecer, su madre no estaba conforme con que ella, por decisión propia fuera a un taller de caricatura japonesa a la tarde, sino que también quería que fuera a andar en rollers, ir al psicólogo, a un taller de arte, a un jardín botánico y millones de cosas sin sentido. Sinceramente, ella prefería estar en la comodidad de su casa, su habitación para ser más específicos. No veía el problema en estar sola y encerrada, si lo único que hacía era leer, escuchar musica y dibujar, podía estar así por horas, amaba leer y dibujar, y escuchar musica le servía para callar a sus demonios.... Esos que la trataban de loca y maldita, había aprendido a vivir con ellos, pero aún la seguían juzgando por matar al cachorro de su madre, tenía 8 años! No era conciente del lo que hacia.... Bueno, si sabía, pero como no iba a admitirlo, sus demonios empezaron a atormentarla, sin tener en cuenta que desde entonces sus padres la obligaron a ir al psicólogo, el cual la derivó a un centro de salud mental para que la hicieran estudios.
Luego de interminables visitas al psiquiatra y a exaustivos estudios, se dieron con que era Maniaca Depresiva y sufría de trastornos del autoestima y que era ezquizofrenica. Desde entonces, su vida había empezado a cambiar, obviamente sus padres tenían que avisar sobre sus condiciones al directivo del colegio al que asistía de niña, y obviamente se corrió la voz, y se convirtió en la loquita del colegio, todos, incluyendo profesores y alumnos, empezaron a hacerla a un lado, sacándole de actividades y trabajos prácticos. Lo que obviamente empeoró su cuadro de Transtorno de autoestima, por ende, tuvieron que cambiarla de colegio, y lo empeoraron metiendola en un colegio sólo de mujeres, donde está comprobado que el 77% sufre de bullying y discriminación, así que tuvo que aguantar hasta los 12 años, año en el cual sus padres decidieron cambiar todo, y se mudaron a otra ciudad.... Lo cual la tranquilizó, ya que si seguía así, iba a terminar matandose.

Y ahí estaba, a 4 años ya de su mudanza, las cosas no habían cambiado mucho, seguía siendo la antisocial de siempre, sólo que al parecer en el secundario sólo te ignoraban, y eso a ella la gustaba. Había empezado a hablar y a salir de su casa, tenía un pequeño grupo de amigos de las clases de Caricatura Japonesa, y entre ese pequeño grupo estaba su mejor amigo Miguel, pero el se empeñaba en que ella lo llamase Mike; ella había mejorado y sus padres lo habían notado, la habían dejado de mandar al psicólogo y a cualquier tipo de terapia, obviamente la seguían medicando para que no se notará que era bipolar ni esquizofrénica, y eso la ayudaba bastante. Pero cuando todo parecía cambiar y estar mejor, sufrió un maldito ataque de pánico y decidieron meterla con psiocologos de vuelta, el rollo volvía a ser el mismo, tuvieron que cambiarla del Instituto al donde iba y este año comenzaría uno nuevo.... Y ahora si estaba aterrada.